El presidente del Comite de Violencia y Adicción del Colegio de Medicos y Cirujanos de Puerto Rico, Arnaldo Cruz Igartua, reclamó al Gobierno que reconsidere su posición de permitir el cultivo de la planta de marihuana para fines medicinales, y que en cambios se hagan más accesiblse productos que sean cannabinoides purificados.

En entrevista con NotiCel, el psiquiatra con subespecialidad en psiquiatría de adicciones, expuso que los dos cannabinoides (componentes químicos del cannabis) principales son el THC (Tetrahydrocannabinol) y el CBD (Cannabidiol).

‘Los otros 64 cannabinoides, son unas cantidades de trazas. Que haciendo embrión de plantas se podrían aumentar y eso, pues se podría. Que se podría sintetizar, también. Pero esos dos actualmente están disponibles. No hay que legalizarlo’, sentenció.

Uno de los productos que actualmente está en el mercado que contiene THC puro es el Marinol. Mientras del CBD actualmente se venden aceite, que reconoce que actualmente no están siendo bien supervisados por la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA, por sus siglas en inglés). Pero además, se encuentra en la cuarta fase de experimentación el medicamento, Sativex, que contiene una mezcla de CBD y THC.

‘Los cannabinoides no se pueden fumar. La marihuana (cruda) se puede fumar… Estamos en contra de lo fumado porque es más adictivo, y porque la marihuana fumada tiene cinco veces más cianuro de hidrógeno y 20 veces más amoniaco que el tabaco, y porque la marihuana cruda le va a llegar al adolescente y se va a enfermar’, puntualizó Cruz Igartua.

El galeno expuso que el Gobierno debe mejor centrar sus esfuerzos en aprobar una legislación que permita el uso de cannabinoides purificados, y que las agencias federales provean una dispensa para que los médicos puedan recetar este tipo de productos. De hecho, dijo que con ciertos permisos se podrían importar los cannabinoides purificados, sin que se tenga que cultivar y procesar la planta de marihuana en Puerto Rico.

Abundó que los proyectos experimentales por el uso de cannabinoides purificados debiera estar en manos de las escuelas de medicina de la Isla.

Sin embargo, lamentó que el interés del Gobierno no sea la salud.

‘Este es el país donde no hay tratamientos para las adicciones. Donde la salud está en crisis’, determinó.

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