La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) premió hoy en Roma al organismo regulador de la pesca en Centroamerica por impulsar esa actividad de una manera responsable y sostenible, informó en San Salvador una fuente regional.

La Organización del Sector Pesquero y Acuícola del Istmo Centroamericano (Ospesca) recibió la ‘Medalla Margarita Lizárraga’ de la FAO, según un comunicado el Sistema de la Integración Centroamericana (SICA), con sede en la capital salvadoreña.

Subrayó que el premio fue concedido a la Ospesca por su ‘rol destacado, práctico, tangible y sostenible, así como catalizador en cuanto ejemplo a seguir en otras regiones del mundo en la aplicación del Código de Conducta para la Pesca Responsable’, de la FAO.

La Ospesca es uno de los órganos ministeriales del SICA y está a cargo de mantener una pesca ordenada en la región, para lo cual, entre otras acciones, reglamenta la veda de especies marinas.

Ministros de Agricultura, otros funcionarios responsables de la pesca en los países del SICA y el director de Ospesca, Mario González, recibieron el galardón en la sede de la FAO en Roma.

La ministra de Agricultura de Costa Rica, Gloria Abrahams, encabezó la comitiva centroamericana porque su país preside el SICA en este semestre, según la nota del organismo regional.

Recordó que desde 1995 está vigente el Código de Conducta de Pesca Responsable de la FAO, ‘que es una herramienta orientativa para asegurar que el mundo haga uso sostenible de los recursos de la pesca y la acuicultura’.

La FAO también creó un reconocimiento bienal ‘para aquellas personas o instituciones que se caracterizan por la aplicación de lo establecido en dicho Código’, que en esta ocasión correspondió a la Ospesca, añadió.

El SICA lo integran Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá y la República Dominicana.

La FAO también premió hoy en Roma a los presidentes de Venezuela, Honduras y Panamá, Nicolás Maduro, Porfirio Lobo y Ricardo Martinelli, respectivamente, por haber logrado los objetivos del ‘Reto del Hambre Cero’ en sus países con dos años de antelación.