Pocos días después de que el presidente Donald Trump exigiera públicamente al Departamento de Justicia que actuara «inmediatamente» para iniciar acciones judiciales contra él y otros rivales políticos.

El exdirector del FBI, James Comey, fue acusado hoy formalmente de falsa declaración y obstrucción de la justicia en relación con su testimonio ante el Comité Judicial del Senado en 2020, pocos días después de que el presidente Donald Trump exigiera públicamente al Departamento de Justicia que actuara «inmediatamente» para iniciar acciones judiciales contra él y otros rivales políticos.

Un comunicado de la Fiscalía Federal para el Distrito Este de Virginia indicó que, de ser declarado culpable, Comey enfrenta hasta cinco años de prisión. «Las sentencias reales por delitos federales suelen ser inferiores a las penas máximas», indicó el comunicado informado por la cadena ABC.

Los cargos se producen tras la destitución por parte de Trump del fiscal federal para el Distrito Este de Virginia, Erik Siebert, quien, según fuentes, había expresado internamente sus dudas sobre la presentación de casos contra Comey, así como de la fiscal general de Nueva York, Letitia James, tras su nombramiento como director de la oficina.

Trump inmediatamente instaló a Lindsey Halligan, asistente de la Casa Blanca y su ex abogada defensora, para dirigir la oficina, a pesar de que ella no tenía experiencia previa como fiscal.