Bruselas – La Comisión Europea (CE) respondió hoy a Francia y Alemania que el cierre de fronteras del espacio Schengen debe decidirse a escala europea, excepto que sea una decisión nacional por un máximo de cinco días.

‘Necesitamos un Schengen que sea más europeo’, indicó en la rueda de prensa diaria de la Comisión el portavoz comunitario de Interior, Michele Cercone, quien explicó que el objetivo de Bruselas es ‘garantizar que las decisiones que afectan a este área se toman a nivel común y no, como ocurre ahora, a escala nacional unilateral’.

Cercone explicó que esto no contradice el espíritu del sistema actual, que permite a los países de la UE decidir el cierre de fronteras cuando detecten ‘una seria amenaza pública o de seguridad interna’.

Por ejemplo, España anunció ayer que suspenderá el Tratado de Schengen y restablecerá temporalmente los controles fronterizos con Francia durante la cumbre del Banco Central Europeo (BCE) del 3 de mayo en Barcelona, ante la previsible afluencia de activistas ‘antisistema’.

Cercone recordó que ‘estas decisiones las pueden tomar (los países) para cinco días y si después de cinco días quieren prolongarlas (…) la decisión final tiene que ser tomada a través de un mecanismo con base europea’.

La CE propone que esa decisión se tome por mayoría cualificada dentro de un comité específico en el que estén representados los Veintisiete.

‘Nuestras propuestas son plenamente compatibles con el cuadro jurídico y legal de la UE y no tocan en nada a la soberanía nacional’, juzgó el portavoz.

Las declaraciones de Cercone se producen después de que Francia y Alemania remitiesen ayer una carta a la presidencia danesa de turno de la UE, en la que piden que los países puedan restablecer los controles fronterizos internos de forma provisional cuando un país del sistema Schengen no consiga atajar un flujo masivo de inmigrantes.

París y Berlín insisten en que la decisión sea nacional no sólo en una primera etapa sino por un periodo de hasta 30 días, y reclaman que esta cuestión sea tratada en el Consejo de ministros de Interior de la próxima semana.

Según el portavoz de la Comisión, en cambio, Schengen no es un tema previsto en la agenda de este encuentro, por lo que como muy pronto se tratará en la reunión siguiente, en junio, después de que se celebren las elecciones francesas.

Cercone recordó, no obstante, que los puntos a tratar en cada encuentro los fija la presidencia de turno, por lo que todavía podría introducirse algún cambio.