Puma Energy insiste en la industria del gas propano
A un año de que Puma Energy entrara al mercado del gas licuado de petróleo, la empresa reiteró el lunes su interes en diversificar la industria.
Esto a pesar de que dos empresas, Tropigas y Empire Gas, las cuales han controlado durante años el cien por ciento de la industria del gas propano en Puerto Rico, se han opuesto públicamente a la entrada de Puma Energy en la competencia comercial, bajo argumentos de que la industria ya está servida.
Esa oposición, que se llevó hasta el Tribunal Supremo, terminó siendo desestimada, y el 6 de febrero de 2015, Puma renovó sus permisos para distribuir LPG, como se conoce al gas licuado de petróleo por sus siglas en inglés.
En una mesa redonda en la oficina de Puma Energy Caribe en el Centro Internacional de Mercadeo en Guaynabo, el gerente general Víctor Domínguez recordó que cuando a principios del 2014, hicieron pública su entrada al mercado, la reacción inmediata de la competencia fue abaratar los costos.
Ese fue el principal argumento que defendió Domínguez para apostar por la diversificación de la industria, haciendo hincapié en que el aumento de la competencia promete un ahorro aproximado de $100 millones anuales para la población de Puerto Rico.
Esta proyección se basa en 'la diferencia entre el precio antes de nosotros entrar y el que pondremos, multiplicado por los 6.3 millones de galones mensuales' que producen. Los 75.6 millones de galones al año que producirán aproximadamente, valorado con el precio ajustado, podría impactar el bolsillo de los consumidores de gas propano.
Hasta ahora, Puma Energy comone el 7% de participación en el mercado del gas propano, y ha cubierto casi todos los renglones. La primera venta de LPG a través del segmento de distribuidores fue en noviembre del 2014. Un mes después, expandieron las ventas a nivel comercial e industrial.
En agosto de 2015, comenzó la venta de LPG en estaciones de gasolina para suplir al mercado automotriz, y aunque por el momento solo una gasolinera en Caguas posee este servicio, y pronto una en Buchanan, la meta es llegar a 15 gasolineras alrededor de la Isla.
Sin embargo, el único segmento que aún no ha sido impactado, sostuvo Domínguez, es la venta de cilindros de 20 libras, debido a que todavía no han obtenido los permisos de distribución, de los cuales se encarga la Comisión de Servicio Público, a pesar de haber sometido la documentación en febrero pasado y aparentemente, cumplir con los requisitos establecidos.
'Ese permiso que se vio en vista pública en agosto fue objeto de oposición por empresas que [argumentaban] que el mercado estaba servido, y que no había necesidad de ningún otro competidor, [pero] la competencia ha traído una reducción de precios marcada en el mercado', argumentó Domínguez.
Incluso, el pasado 18 de noviembre, el Departamento de Asuntos del Consumidor (DACO) emitió una orden para controlar los márgenes de ganancia bruta de la industria del gas propano, 'debido a los altos precios históricos que se mantienen en este segmento', controlado por Tropigas y Empire Gas. Según Domínguez, esta orden no hubiese afectado a Puma de haber estado ya insertada en el mercado, debido a que ya estaría 'cumpliendo y por debajo del precio máximo que puso DACO'.
Entre los planes futuros, Puma Energy también proyecta expandirse a un mercado a conversión de flotas industriales y comerciales. Además, busca continuar sus planes de exportación para 2016, que arrancó en octubre pasado con la exportación a Santa Cruz donde venden a 'un cliente industrial', y preven expandirse a San Thomas y San Martín.
Con una inversión de $46 millones, Puma anunció en enero de 2014 la construcción de instalaciones de almacenamiento de LPG en la Terminal de Bayamón, junto a un moderno sistema de carga. 'Entendíamos que el mercado podía absorber un competidor más, apostamos a que nuestra capacidad de integrar nuestra distribución, almacenaje y venta iba a ser competitivo', expresó Domínguez.
Además, optar por una 'alternativa de generación eléctrica, un combustible limpio y eficiente para cogenerar', además de los costos y las proyecciones de cada vez más acogida de la población, eran ingredientes para identificar en esta una oportunidad de crecimiento. 'Las industrias y los negocios grandes que generen su propia energía podrán obtener ahorros significativos comparado con su factura actual', concluyó Domínguez.