Se ahoga en contradicciones el candidato del PIP

Aunque nunca esperamos escuchar a un honesto Juan Dalmau, el debate resultó para poner a flor de piel sus intentos de engañar al pueblo con estribillos obsoletos, ideas exageradas, un reclamo fatulo a la democracia, y propuestas que ya se están implementando en la función pública. Los estribillos memorizados que en esencia no significan nada, fueron la orden del día en el discurso del socialista Dalmau. El uso de las típicas muletillas que pretenden hacerle parecer intelectual y sofisticado, lo que verdaderamente logran proyectar su poca transparencia. Dalmau, quien lucía incomodo y nerviosos, dijo que intenta lograr promover “los derechos universales”, un “enfoque que atiende al bienestar”, un “desarrollo sostenible”, y buscar “prevenir enfermedades de una manera integral y holística”, sin explicar que significan estos términos.

Salud Universal

Dalmau trato de explicar los beneficios de una cubierta de salud universal eliminando la industria de seguros de salud. Esta propuesta puede estar fundamentada en la ignorancia o en la mentira. Si bien la idea de eliminar las compañías de seguros de salud a favor de un sistema universal de salud administrado por el gobierno está basada en el deseo de acceso a atención médica integral y equitativa para todos, es esencial reconocer las posibles consecuencias negativas de tal transición. La reducción de la competencia, las ineficiencias burocráticas potenciales, la limitación de la libertad de selección del paciente, las presiones financieras sobre los proveedores, el riesgo de racionamiento y el aumento de impuestos presentan todos desafíos significativos. El financiamiento necesario para sostener un sistema de salud universal a menudo requiere una tributación significativa de la población.

El candidato ignora el hecho de que el gobierno federal mediante el Centro de Medicare y Medicaid tienen que aprobar el Plan Estatal de Salud (“State Plan”) previo a aprobar el uso de cerca de $2,000 millones que aportan anualmente.

El candidato de la alianza ignora el hecho que la transición a un sistema universal de salud administrado por el gobierno tendría repercusiones negativas para los proveedores de atención médica. Muchos proveedores dependen de una variedad de reembolsos de seguros privados para mantener sus operaciones. La estandarización de los pagos a través de un sistema gubernamental podría llevar a tasas de reembolso más bajas, presionando a las instalaciones de atención médica, especialmente en áreas rurales o desatendidas.

Un modelo de atención médica exitoso debe equilibrar cuidadosamente el acceso, la calidad y la eficiencia, considerando cómo integrar los beneficios de los sectores privado y público en lugar de depender únicamente de un enfoque gubernamental. En esta búsqueda de reforma, es crucial aprender de ejemplos globales y experiencias pasadas para crear un sistema que realmente sirva a las necesidades de toda la población sin sacrificar la calidad o el acceso.

La transición a un sistema universal de salud administrado por el gobierno también podría tener repercusiones negativas para los proveedores de atención médica. Muchos proveedores dependen de una variedad de reembolsos de seguros privados para mantener sus operaciones. La estandarización de los pagos a través de un sistema gubernamental podría llevar a tasas de reembolso más bajas, presionando a las instalaciones de atención médica, especialmente en áreas rurales o desatendidas.

Impuesto Global de 15%

El impuesto global de 15% se refiere a una propuesta fiscal que busca establecer una tasa impositiva mínima del 15% para las grandes corporaciones a nivel mundial. Esta es una iniciativa de corte socialista que pretende cerrar las brechas que permiten a las empresas trasladar sus ganancias de un país a otro, busca asegurar que las empresas multinacionales paguen al menos un porcentaje mínimo de impuestos, independientemente de dónde estén registradas sus operaciones, y busca redistribuir las contribuciones entre países con economías en desarrollo.

El acuerdo para implementar el impuesto global ha sido apoyado por más de 130 países, sin embargo, su implementación enfrenta desafíos, especialmente en cómo cada país lo adoptará y aplicará, así como las posibles repercusiones en la inversión y competitividad económica.

Para sorpresa de todos, entre las propuestas de desarrollo económico de Dalmau está el imponer el pago del impuesto del 15% global. Es ridículo pensar que el desarrollo económico de Puerto Rico dependería de pagar un impuesto que se enviaría a otros países para ser distribuido. Dalmau intenta que los electores ignoren la obligada erosión de la competitividad de las empresas locales, la carga desproporcionada para las PYMES, las dificultades y potencial evasión en la recaudación fiscal, y el desincentivo a la inversión en negocios nativos. El candidato independentista no logró presentar un enfoque equilibrado que fomente un entorno fiscal justo, sin comprometer el crecimiento económico ni la innovación, lo que es esencial para el bienestar de las economía de Puerto Rico.

Seguridad Pública

Curiosamente, Dalmau que tanto critica el sistema actual de gobierno en busca de un sistema socialista, al presentar sus ideas de cómo combatir la criminalidad se concentra en ideas y propuestas que ya se están implementando. Como dato interesante, propuso el inspeccionar la carga marítima mediante métodos electrónicos, que es una idea que propuso Jenniffer González mediante la radicación de un proyecto de ley que ha permitido que en los pasados 10 años, agencias federales y las locales hayan logrado escanear cerca de 3 millones de furgones. La duda es si Dalmau ignora este dato público, o le cuesta darle crédito a González.

Estatus Político

Por más que lo intente, es obvio que a Dalmau le duele tener que exponer el tema del estatus político de Puerto Rico. Si bien la creación de una Asamblea de Estatus para definir el futuro político de Puerto Rico puede aparentar tener un enfoque inclusivo, sus efectos negativos son dignos de consideración. La división política y social, la incertidumbre económica, la posibilidad de marginar problemas urgentes y la falta de consenso pueden complicar la ya difícil situación de la isla. Ante esto, es crucial buscar soluciones que promuevan el bienestar colectivo y la estabilidad, sin dejar de lado las necesidades y aspiraciones de la población puertorriqueña. En ese particular, no hay nada como la autodeterminación de un Pueblo mediante el voto directo de los ciudadanos.

Dalmau prefiere una Asamblea donde el gobernador nombre a sus afiliados a ser miembro de esa asamblea y donde no se representen todas la ideologías. La naturaleza de una Asamblea de Estatus nos va a llevar a una falta de consenso entre los participantes, lo que va a resultar en un proceso lento, poco eficiente y no democrático.

El proceso al que Dalmau obligaría a Puerto Rico a someterse va a generar un período prolongado de incertidumbre legal y económica para Puerto Rico. Las empresas e inversionistas, que suelen ser cautelosos ante situaciones de inestabilidad, lo que puede llevar a la reducción de inversiones y al aumento del desempleo. Esta falta de claridad sobre el futuro político de la isla podría obstaculizar el desarrollo económico y agravar los retos financieros ya existentes. Dalmau sabe que no hay posibilidad de que la independencia logre ganar un plebiscito en la isla. Por tanto, su mejor opción es tomarle el pelo a los puertorriqueños a través de la treta que representa una Asamblea Constituyente.

Fondos Federales

Dalmau intenta menospreciar que, si se convierte en gobernador, la isla comenzaría a perder fondos federales. Esto es otra expresión de deshonestidad. Estipulemos que, de convertirse en gobernador, de golpe y por raso la isla no perdería fondos federales. Pero si tomamos en cuenta que estos fondos son en su mayoría competitivos y que requieren recurrentes visitas a la capital federal para cabildear ante el Congreso fondos adicionales, resulta contradictorio ver a un socialista independentista suplicando el aumento de las partidas asignadas a la isla. Nadie le cree a Dalmau que acudirá a la Casa Blanca, al Senado federal y al Congreso para solicitarle a los funcionarios federales que le asignen fondos a la isla, al mismo tiempo que hace causa común con Cuba, Nicaragua y Venezuela para ofender internacionalmente al gobierno de los Estados Unidos.

Si Puerto Rico deja de recibir fondos federales, vamos a enfrentar severas consecuencias económicas y sociales. Algunos de los impactos más significativos incluyen la crisis económica:

La economía de Puerto Rico se basa en gran medida en financiamiento federal. La ausencia de estos fondos podría llevar a un aumento en el desempleo y a la pobreza extrema. En ausencia de fondos federales, los servicios públicos se verían significativamente afectado incluyendo recortes en servicios esenciales como salud, educación, y seguridad pública. Sin fondos federales, el gobierno tendría dificultades para cumplir con sus obligaciones financieras, lo que podría agravar la situación de insolvencia lo que provocaría un deterioro en la calidad de vida de los habitantes. La conclusión inevitable sería la emigración de profesionales en búsqueda de mejores condiciones de vida.

Esto es precisamente la fórmula que han provocado los dictadores como Nicolas Madura, Fidel Castro y Daniel Ortega en sus países. Inicialmente desarticulan la economía, provocan un deterioro de las condiciones de vida, incitan la inseguridad, suprimen las libertades ante la crisis, y promueven la emigración masiva.