Revisan usos de terrenos de Ciudad de las Ciencias para darle prioridad a las ciencias
El Plan Maestro para la Ciudad de las Ciencias, uno de los proyectos de mayor envergadura de esta administración con el cual se pretende atraer a compañías de biotecnología e informática, está en un proceso de revisión que incluye una evaluación de los usos de terrenos para que realmente priorice la ciencia, en lugar del uso residencial como originalmente se estipulaba.
La información la confirmó el Director del Fideicomiso de Ciencia, Tecnología e Investigación (FCTI), Iván Ríos, quien indicó que la revisión de los usos de terrenos está a cargo de la compañía Toro Arquitectos, que diseñó el plan original. 'Una probabilidad es que las residencias ocupen una parte menor del proyecto. Estamos adecuando el plan maestro a las circunstancias de ahora, desde la repartición de usos hasta las escalas de los edificios', mencionó.
El proyecto que ha sido promocionado como un complejo de investigación científica, además de laboratorios, oficinas e incubadoras, incluye la construcción de un hotel, así como viviendas multifamiliares, tiendas al detal y una escuela.
El plan original de hecho designaba más de la mitad de los terrenos, un 60 por ciento, para uso comercial y residencial, y sólo 27 por ciento para usos de biotecnología.
A preguntas de este diario, Ríos indicó que las residencias pueden estar disponibles para uso general y no exclusivamente de científicos. Aunque los comercios incluyen empresas de ciencia, también está disponible para la construcción de lavanderías, farmacias y colmados.
Ríos defendió esta variabilidad de usos al resaltar que persiguen con ello crear un entorno urbano que haga atractivo el acomodo de empresas e investigadores en esa zona, pero reconoció que están en proceso de revisión para darle mayor proporción a los proyectos de ciencia.
'Mientras más científicos e investigadores se vayan estableciendo en la CC, más necesidad va haber para comercios y residencias, pero ciertamente lo más importante son las empresas de ciencias vivas, tecnología e informática', mencionó acerca del proyecto que se erigirá en los antiguos terrenos de la Penitenciaría Estatal de Río Piedras, y que espera redunde en la creación de 14,000 empleos directos.
La inversión para la construcción de la Ciudad de las Ciencias se estima en $1,799 millones, que, según Ríos, provendrá de alianzas con la industria privada y la academia.
El desarrollo continúa, sin embargo, sujeto a los esfuerzos de promoción y a la receptividad de las empresas: 'es una gama de posibilidades que las va a dictar el mercado y el transcurso del tiempo', mencionó Ríos,. Hasta el momento al FCTI le corresponderá proveer la infraestructura eléctrica, de agua, luz, telecomunicaciones y transportación.
Intensa caza de inquilinos
El equipo que lidera saldrá hoy, domingo, hacia San Diego, California, donde participarán de la convención más importante de biotecnología a nivel mundial como parte de los esfuerzos de promoción de Ciudad de las Ciencias.
Allí se reunirán con más de diez compañías estadounidenses y españolas con las que esperan entablar 'acercamientos importantes para ir encaminando el proyecto'. La compañía PharmaBioSource es quien desarrolla el plan de promoción para el Gobierno.
Pese a que apuntó a la creación del ecosistema urbano como el factor más importante para la atracción de las empresas e investigadores, Ríos enfatizó que las exenciones contributivas han sido muy efectivas en el desarrollo de investigación y productos nuevos. Enfatizó que la Ley 101 de Incentivos Contributivos a Investigadores Cientícos, facilitó el año pasado menos de $2 millones en exenciones sobre salarios y obtuvo a cambio más de $25 millones en la producción de investigaciones.
La proximidad a hospitales, universidades y laboratorios en una zona que se conocerá como El Corredor del Conocimiento, que incluye al Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico (UPR), al Jardín Botánico, al edificio de Ciencias Moleculares y al Centro Comprensivo de Cáncer es una de las apuestas principales del Gobierno para la atracción de empresas para incentivar la industria del conocimiento en Puerto Rico.
Senado aprueba política pública de ciencia, tecnología e innovación
De otro lado, esta semana el Senado aprobó unánimemente el proyecto del senador Ángel Rosa para establecer la política pública de ciencia, tecnología e innovación de Puerto Rico.
'A pesar de que el gobierno hace una inversión de $20 millones anuales en el Fideicomiso, Puerto Rico sigue rezagado en el área de ciencia y tecnología si lo comparamos con otras economías pequeñas en el mundo como Irlanda y Singapur. Por eso queremos establecer un sistema de medición de la ejecutoria del fideicomiso con métricas especificas como: el monto invertido actividades de investigación y desarrollo, la proporción de empresas que introducen productos nuevos, el número de patentes aprobadas y comercializadas por investigadores en Puerto Rico, el mejoramiento académico de los estudiantes puertorriqueños en ciencias y matemáticas y la proporción de créditos contributivos otrorgados por el gobierno a actividades de investigación y desarrollo', dijo el senador popular.
'Este no es un proyecto para desmantelar el Fideicomiso ni debilitarlo. Al contrario, queremos fortalecerlo mediante legislación inteligente para que se puedan atender los señalamientos que han surgido sobre el funcionamiento de esta entidad y su suceptibilidad a los vaivénes políticos que han ido mermando su capacidad para fomentar el desarrollo científico en Puerto Rico. No es hasta recientemente que hemos visto un cambio en las estrategias del Fideicomiso. Pero siempre existe el riesgo que una nueva administración con una visión menos afín a su funcionamiento, pueda dejarlo caer en el marasmo que ha caracterizado su existencia', añadió.