El base canadiense Steve Nash, ganador de dos premios de Jugador Más Valioso (MVP), tras 19 años en la NBA anunció el sábado de manera oficial su retirada de la competición sin haber podido conseguir un título de liga.

Nash, de 41 años, jugó primero con los Suns de Phoenix, que lo trasladaron a los Mavericks de Dallas, luego volvió a los Suns y cerró su carrera profesional con los Lakers, aunque desde la pretemporada no ha podido jugar ningún partido oficial por la lesión crónica que sufre en la espalda y que se agravó antes que comenzase la competición regular.

Internacional canadiense, aunque nació en Johannesburgo (Sudáfrica), concluye su carrera profesional con 10.335 asistencias, tercera mejor marca en la historia de la NBA, sólo superado por los bases estadounidenses John Stockton (15.806) y Jason Kidd (12.091).

También es considerado el más certero en los tiros de personal en toda la historia de la liga, superando la marca de otro exbase Mark Price, al conseguir marca de 90.4 por ciento de eficacia.

Durante nueve temporadas consecutivas, del 2001-02 al 2008-09, fue el jugador clave en equipos que ocuparon el lugar número uno de la liga en el juego ofensivo y triunfó con Mike D’Antoni cuando ambos estuvieron juntos por primera vez en los Suns.

Nash, que ganó los premios de MVP las temporadas seguidas del 2005 y 2006, las primeras que jugó con los Suns, al final se tuvo que ir de la NBA sin lograr un título de liga, como les sucedió a otros galardonados con el premio como fueron los miembros del Salón de la Fama, el ala-pívot Karl Malone, y el alero Charles Barkley.

También se espera que Nash llegue al recinto sagrado de las leyendas al ser considerado como uno de los mejores bases en la historia de la NBA.

La noticia de la retirada oficial de Nash fue dada el sábado por él mismo a través de una carta que publicó en la página de internet ‘The Player’s Tribune’.

‘El regalo más grande que tuve es estar completamente inmerso en mi pasión y en la lucha por algo que yo tanto amaba. La obsesión se convirtió en mi mejor amiga. Hablé con ella, la quise, peleé con ella’, escribió Nash.

‘Con eso es con lo que estoy más agradecido en mi carrera y en toda mi vida, en cierto modo. Obviamente valoro a mis hijos y a mi familia más que al juego, pero en algunos aspectos tener este ‘amigo’ me ha hecho quien soy, me enseñó y me ha dado una misión que se siente insustituible’.

‘Estoy muy agradecido porque he aprendido muchas lecciones de gran valor sobre mí mismo y sobre la vida y, por supuesto, sigo aprendiendo… aún tengo mucho que aprender. Otro regalo increíble’.

Nash considera que ‘mucha gente dice que un atleta muere dos veces y, en cierto modo, eso es cierto. Si quieres disfrutar y ser feliz en la vida, de alguna manera tienes que decir adiós a tu antiguo yo. No es fácil, sobre todo para los hombres porque no somos los más comunicativos de la especie. Así que es difícil ponerlo todo en perspectiva’.

Nash tuvo una serie de problemas por lesiones casi al final de su carrera, pero la calidad de su juego le permitió conseguir un contrato con los Lakers por tres temporadas y 28 millones de dólares en el 2012, y fue compañero del ala-pívot español Pau Gasol y del escolta Kobe Bryant.

Aunque hizo todo lo posible por mantener su calidad, las lesiones no se lo permitieron y en la competición del 2012-13 sufrió fractura en la pierna izquierda, apenas en su segundo partido y se perdió los siguientes 24.

La temporada pasada los problemas físicos continuaron y tuvo que perderse la mayor parte de la competencia, excepto 15 partidos. Los problemas en la espalda, rodillas y tendones le permitieron jugar sólo 65 de 164 partidos posibles en las pasadas dos temporadas con los Lakers.

Nash, a través de su comunicado recuerda que cuando firmó el contrato con los Lakers tuvo como objetivo ‘incendiar’ con su juego la ciudad de Los Ángeles.

Dice que incluso declinó la oferta más lucrativa que le ofrecieron en toda su carrera ‘sólo por jugar para los Lakers en mi último capítulo dentro de la NBA, pero en mi segundo partido me fracturé la pierna y entonces ya nada fue igual’.

Decidió retirarse de la liga desde octubre pasado, pero el gerente general de los Lakers, Mitch Kupchak, le pidió que retrasara su decisión hasta después del 19 de febrero para que el equipo viera la posibilidad de transferirlo a cambio de los 9.7 millones dólares del contrato de Nash, y beneficiar el tope salarial del equipo.

Nash asegura que decidió hacerlo porque el equipo siempre lo trató bien y ‘eso es lo menos que podía hacer por ellos’.

El base inició su carrera con los Suns, quienes lo trasladaron a los Mavericks en 1998, pero regresó con el equipo de Phoenix en el 2004 como agente libre, y en el 2005 y 2006 ganó los MPV de manera consecutiva, que lo convirtieron en uno de los únicos 10 jugadores que lo logran en años seguidos.

Para Nash, un enamorado del fútbol, la última temporada con los Suns fue la del 2011-12 y luego pasó a los Lakers, el equipo con el que se retira de manera definitiva, ya que de acuerdo con su comunicado ‘jamás volveré a jugar baloncesto de manera profesional’.

‘Todo esto me provoca un sabor agridulce en la boca, la retirada de mi actividad favorita no es fácil, extrañaré mucho jugar, pero también me siento emocionado de aprender y de realizar otras actividades’, dijo.