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Opiniones

El Desvío del Partido Popular y la democracia en Puerto Rico

El licenciado Olvin Valentín analiza la situación actual dentro del Partido Popular Democrático.

Licenciado Olvin Valentín.
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La política es, en esencia, un reflejo de las promesas y esperanzas de una sociedad. Pero ¿qué sucede cuando aquellos a quienes confiamos nuestra voz, nos traicionan? Esta es la situación que hoy día parece vivir Puerto Rico con el Partido Popular Democrático (PPD).

El PPD, que alguna vez se presentó como el estandarte del pueblo y de la justicia democrática, parece haber perdido su norte. Su falta de visión clara lo ha llevado a un estado de irrelevancia política, incapaz de afrontar los desafíos que enfrenta el Puerto Rico del siglo 21. Sin embargo, lo más preocupante no es su apatía, sino las acciones que toman en contra de las promesas hechas al pueblo.

Al inicio del cuatrienio, el PPD criticó ferozmente el Código Electoral, denunciándolo por ser injusto, poco democrático e impulsado por un solo partido. Fue un código que, recordemos, se aprobó en el último minuto con el exclusivo apoyo del Partido Nuevo Progresista (PNP). No obstante, hoy día, cuando el PPD tiene el control legislativo, en vez de corregir estas deficiencias, se ha aliado con el PNP para introducir enmiendas que agravan aún más las fallas democráticas del código. Es una ironía que, al intentar mejorar un código ya defectuoso, esta alianza lo haya empeorado.

Esta traición a la democracia y al pueblo ha abierto una brecha entre el PPD y la ciudadanía. El Movimiento Victoria Ciudadana ha emergido como una alternativa política viable para lograr los cambios sociales que urgen para Puerto Rico. Las encuestas que indican su crecimiento, así como el declive del bipartidismo, son un reflejo de la insatisfacción y el desencanto de la población hacia las acciones de los partidos que han tenido el privilegio de gobernar en país: el PNP y el PPD.

Pero aún hay más. La falta de transparencia en los cambios al Código Electoral es preocupante. Si bien se han promocionado medidas que pueden tener apoyo popular, como el voto adelantado para adultos mayores, no abundan mucho sobre aquellas enmiendas que atentan contra la democracia, como las limitaciones que le imponen a las candidaturas por acumulación de los partidos de oposición o nuevos partidos que surjan. Este tipo de acciones solo reducen la diversidad y la pluralidad en el proceso democrático, consolidando el poder en manos de solo dos partidos y perjudicando a las demás fuerzas políticas.

Por otro lado, el control en la Comisión Estatal de Elecciones (CEE) es un tema esencial pero poco comprendido por la mayoría. Si bien muchos no conocen a cabalidad su funcionamiento, lo cierto es que todo lo que sucede en la CEE tiene un impacto directo en las elecciones y sus resultados. El pueblo merece saber y entender todos los cambios propuestos para poder ejercer su derecho al voto de manera informada.

Puerto Rico necesita líderes que prioricen la democracia y la justicia por encima de intereses partidistas. El PPD, al traicionar sus principios y al pueblo, ha demostrado que su brújula política está desorientada. El país se merece un partido y líderes que trabajen con transparencia, que fomenten la participación ciudadana y que se mantengan fieles a los principios democráticos. La dirección que han tomado el PPD y el PNP durante las pasadas décadas es preocupante, y es momento de que el electorado tome cartas en el asunto.

El escenario electoral actual ahora cuenta con nuevas fuerzas políticas, como lo es Victoria Ciudadana, que ofrecen a la ciudadanía modelos más participativos, democráticos y abiertos de hacer política, enfocados en la búsqueda colaborativa de soluciones y en alcanzar un gobierno honesto y que funcione. Ya las opciones no se limitan a dos partidos, ni a escoger el menos malo. La verdadera democracia se basa en la voz del pueblo, y esa voz debe ser escuchada y respetada.

El autor es abogado, empresario y Excomisionado Electoral del Movimiento Victoria Ciudadana. Cuenta con un Juris Doctor de la Universidad Interamericana de Puerto Rico y estudios subgraduados en comunicaciones, administración de empresas y mercadeo. Ha trabajado principalmente en el sector empresarial y PYMES, así como con organizaciones sin fines de lucro e iniciativas comunitarias y culturales a nivel local e internacional.