El empresario y ex beisbolista profesional, Alfredo Escalera Maldonado, habla sobre la adquisición de las operaciones del diario digital

En los recientes días decidí tomar la responsabilidad de seguir liderando el impresionante avance de NotiCel como uno de los medios de comunicación más importantes de la isla.

La historia de NotiCel se caracteriza por el compromiso de presentar una opción periodística libre y apegada a los más profundos lineamientos éticos. Los profesionales que por años han colaborado en este esfuerzo, son los mejores testigos de los retos superados y de las metas alcanzadas, producto de un compromiso inquebrantable con la libertad de expresión.

Desde 2011, NotiCel ha estado al frente de otras publicaciones al momento de reportar los eventos más relevantes en Puerto Rico.

Nadie puede dudar que el estilo incisivo de reportar ha sido eje de controversias y debate, pero también ha sido objeto de múltiples galardones y reconocimientos.

A pesar de las polémicas creadas entre algunos sectores por el estilo de titular las historias o reportar la noticia, no hay duda que la intención de los reporteros siempre ha estado centrada en comunicar la verdad y en este particular, no preveo cambio alguno.

Durante los pasados días he escuchado detenidamente a los que desean ver cambios en NotiCel y a los que los resisten.

A los que desean que NotiCel opere mediante la generación de cambios, que favorezcan el desarrollo del diálogo sensato y balanceado, les aseguro que eso representará los valores básicos de nuestro proceder como equipo.

A los que exigen que no se cambie la “línea editorial”, les aclaro, que la única línea editorial será publicar la verdad.

“La verdad como es” trasciende toda línea editorial. Si alguien interpreta esto como una agenda, pues que así sea.

Hace unos días atrás un compañero me preguntó muy sabiamente: ¿Si piensas que el medio es bueno y te gusta, por qué hay que realizar cambios?

Las modificaciones no se hacen porque algo esté mal, sino porque siempre hay espacio para mejorar en un mundo cambiante.

No siento insatisfacción con NotiCel, al contrario, me uno para continuar su trabajo y mantener el taller de trabajo abierto, reconociendo que hay un reto monumental para atemperarnos a una industria con inmensos desafíos y a una competencia que dejó de ser local para convertirse en global.

Nuestros lectores exigen cada día más, y ante ese reclamo no escrito, nuestra oferta debe estar a la altura de ese pedido.

No es un cambio el exigir que nuestros valores como empresa estén ligados a proveer una cobertura de forma inmediata, justa, y que surja de la honestidad de nuestros periodistas. Así ha sido siempre.

El único cambio es que esos valores sean claramente entendidos por todos nuestros lectores y por aquellos que son protagonistas de la noticia, de modo que sientan la apertura de expresar su opinión a través de una franca discusión, y lo más importante utilizando nuestras propias plataformas.

El impulsar el objetivo de que nuestro contenido se distinga por reseñar investigaciones detalladas y sustentadas, que permitan orientar al lector sobre aquellos temas que desea saber y que a la vez mejoren su calidad de vida, no es un cambio. Eso es precisamente lo valioso de NotiCel como medio de comunicación.

El cambio radicará en que esas investigaciones y reportajes puedan ser enriquecidos con la interacción de nuestros lectores y con el compromiso de darle foro a aquellos que tengan un sentir distinto.

Nuestra intención no es dar un veredicto sobre un tema, sino plantar las interrogantes para que nuestro lector tenga los elementos de juicio para perseguir los cambios que mejoren su destino.

El reseñar la verdad, tal y como es, siempre irá de la mano con beneficiar a nuestros lectores y la vida colectiva en Puerto Rico.

Según se ha establecido a través de la historia de la humanidad “lo único constante en la vida son los cambios”. Reconozco que los cambios pueden estar inevitablemente plagados de incomodidad y a veces de incertidumbre.

Esperen un NotiCel, en constante cambio, en redoblado crecimiento e incursionando en nuevas plataformas electrónicas para cruzar nuevas fronteras.

Así pues, nos ajustaremos a nunca estar cómodos y a ignorar las intrigas. Al así hacerlo, seguiremos siendo la primera opción que consideren los lectores cuando deseen conocer de forma rápida los acontecimientos que ocupan y afectan a nuestra sociedad.

Nuestro compromiso de cambio es uno sensible y no deja de lado el deber de proteger la imparcialidad en los reportajes, de evitar el favoritismo, de respetar la competencia y evitar manchar reputaciones.

Estoy convencido de que la verdad es solo una. Nuestro gran reto ante los cambios tecnológicos, de preferencias del lector, de la constante innovación de las plataformas digitales, y por supuesto, de la gerencia de este medio, es lograr perpetuar una cobertura noticiosa que se circunscriba a lo que ha sido el lema de NotiCel desde su fundación y documentar por el bien de Puerto Rico: “La verdad como es”.