Se trata de quererse como uno es, lejos de la estetica que inmisericordemente quiere siempre imponer la sociedad.

La joven británica de 23 años de edad Harnaam Kaur, quien vive en la localidad de Slough del condado de Berkshire en Gran Bretaña, sufre de hirsutismo extremo a raíz de un raro desorden dentro del síndrome de ovarios poliquísticos que padece. Por ende, desde la prepubertad ha tenido que lidiar con el crecimiento de exceso de bello en su cuerpo y rostro.

Imagen de Harnaam cuando niña. (Barcroft Media)

Debido a esto, desde niña vio cómo el bello crecía excesivamente en todo su ser, especialmente en su cara. Mientras otras niñas a los 11 años de edad sueñan con maquillaje y pintalabios, Harnaam afrontaba la burla, pues su condición le interpuso una barba y un bigote, además de bellos en el área del pecho y la espalda. No fue fácil aceptar la mofa de sus compañeros de escuela. No quería salir de su casa. Hasta llegó a autoinfligirse castigo físico e incluso pensó en suicidarse.

‘Fue bien difícil esa etapa’, dijo esta semana la joven a medios británicos. ‘Me sentía mal. La gente me hacía sentir mal. No quería ni salir de mi casa’.

Eso fue hasta los 16 años de edad, cuando se bautizó en la religión Sikh.

‘Decidí aceptar ser como soy. Me siento tan femenina como cualquier mujer. Además, Dios dice que nuestro cuerpo debe ser tal y cómo Él nos lo dio’, apostilló.

Vea el vídeo de una entrevista que el portal británico de periodismo independiente, Barcroft.