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Economía

Sin que aterrice el IVA ya los consumidores están aguantados

El gasto de compra promedio de alimentos en Puerto Rico se redujo en un 14% durante este año, un cambio dramático con relación al patrón de disminución que se ha venido observando durante años anteriores. Esta merma representa uno de los mayores retos de la industria, que a su vez responde con medidas correctivas de reducción de nómina.

La reducción tan dramática de la compra de alimentos que reflejó el estudio de la Radiografía del Consumidor 2015 sorprende porque los datos también arrojaron que un 47% de los entrevistados ha reducido sus salidas a comer fuera del hogar, y un 36% están llevando almuerzos a sus trabajos. Pese a que esto debiera redundar en un beneficio para los minoristas, dado a que la gente prefiere confeccionar productos en el hogar, esto no ha sucedido.

'En teoría, la demanda por alimentos es inelástica: todo el mundo tiene que comer. Lo que pasa es que cambia el tipo de productos que están comprando, eligen productos más baratos y se limitan a lo necesario', analizó Manuel Reyes Alfonso, vicepresidente Ejecutivo de la Cámara de Mercadeo, Industria y Distribución de Alimentos (MIDA).

De hecho, los datos del estudio encomendado por MIDA a la compañía Ipsos, reflejan que también hubo cambios en la canasta básica de alimentos: las carnes rojas y los quesos quedaron fuera de la lista, a diferencia del año anterior en que aparecían entre los diez alimentos más comprados. 'El pollo es una proteína más económica', lo cual explica parte de los cambios, según Mario Rodríguez Martínez, presidente del comité a cargo de la investigación. Mientras tanto, los huevos y el azúcar son los nuevos integrantes de la canasta básica de los puertorriqueños.

Rodríguez Martínez destacó que seis de los diez alimentos en la canasta básica tienen ventas por debajo del año anterior. 'Si esto ocurre en la canasta, imagínese los productos que no forman parte de la canasta básica: el impacto será mucho mayor!', resaltó.

La merma ha ocasionado que los supermercados incurran en un patrón de aumentar los precios, despedir a empleados, reducir la cantidad de productos, así como las marcas y, como última opción, los especiales de los 'shoppers'. En el último informe de tendencias mensuales de MIDA, un 64% de los detallistas y mayoristas indicó considerar la reducción de nómina como medida correctiva.

El comité de MIDA identificó, sin embargo, áreas de oportunidad que pudieran ayudar al crecimiento de la industria, entre las que destacan: exportar productos ante la creciente migración de puertorriqueños a Estados Unidos, mercadear o sugerir menús para ayudar a 4 de cada 5 encuestados que planifican el menú el mismo día, y ampliar las categorías de productos disponibles para la venta, como pudiera ser el caso de las bebidas alcohólicas.

Este año, la entidad realizó además el estudio 'Retrato de la Industria de Alimentos', con información operacional y financiera de los negocios. Entre los hallazgos principales, se encuentra una pérdida aproximada de $150 millones en los supermercados, por la merma promedio de 2.79% por concepto de productos robados, dañados o que se vencen. Esto es un margen significativo, en un sector cuyo margen de ganancia es de 1.5%.

'Los grandes presupuestan siempre la merma, y nunca había sido tan grande como esa. Siempre había sido entre 1.5% a un máximo de 2%', indicó el presidente, Ricky Castro Ortiz.

Los estudios de MIDA se presentarán el jueves, 4 de junio durante la convención anual en el Hotel El Conquistador de Fajardo, junto a una serie de charlas, entre las que destaca un foro para analizar la sustentabilidad y competencia de la industria.

(Archivo/NotiCel)
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