El gerente general de la Selección Nacional de Baloncesto Femenino, Juan A. Flores Galarza, expresó en la noche del viernes mediante comunicado de prensa que desde el primer día la organización ha apoyado y ha sido facilitadora para que Carla Cortijo cumpliera su sueño de jugar en la Asociación Nacional de Baloncesto Femenino (WNBA, por sus siglas en ingles).

Flores recapituló el orden de sucesos de cómo procedió el asunto entre el equipo deAtlanta, el agente y su persona, indicando que ‘yo no sé si habían firmado un contrato. A mí me llamó la gerente general y presidenta del equipo de Atlanta, Angela Taylor, y ella me indicó que ellos (Atlanta) tenían interés en firmar a Carla, que si nosotros estábamos de acuerdo. Mi respuesta fue que sí, que para nosotros sería un orgullo que Carla jugara en la WNBA, pero siempre y cuando se cumpliera con la condición acordada desde el primer día’.

Sin embargo, Taylor no estaba al tanto de las condiciones que Flores le había indicado al agente de Cortijo.

‘Ella me expresó que nadie le había hablado de condiciones. Yo le expliqué que la única condición era que le diera permiso a Carla de participar del Preolímpico, de la misma forma que otros equipos permiten que sus jugadores participen del torneo’, enfatizó.

Flores añadió que el agente de la jugadora participó de la conversación y en ningún momento tuvo reparos en lo que se discutió telefónicamente.

‘Yo le indiqué a Taylor que alguien desde el primer día no había sido sincero ni transparente. Yo le cuestioné al agente y él me admitió que si ponían esa condición el equipo de Atlanta no la invitaba a observarla’, manifestó en el comunicado.

Según se informó, Flores realizó gestiones con los organizadores del torneo Invitacional celebrado en China para que hicieran los trámites del cambio de pasaje de la jugadora y esta pudiera viajar a Atlanta.

‘Nosotros hicimos todo lo que estuvo en nuestro alcance para que ella pudiera viajar a Atlanta. Los chinos muy decentemente aceptaron y el costo por el cambio de fecha estuve dispuesto a pagarlo de mi propio bolsillo para ella fuera a cumplir su sueño. Sin embargo, el cambio no se efectuó porque no había espacio’, concluyó.