Puerto Rico está repleto de maravillosos lugares para disfrutar de la naturaleza. El chapuzón del verano no tiene que ser en playas. Nuestras montañas esconden rincones que te sorprenderán con increíbles paisajes y paradisiacos ríos, charchas y saltos de agua.

Si tienes sed de aventura, sigue los consejos del veterano locutor de Alfa Rock, Fred Virella que compartió con Noticel algunos de sus ríos preferidos.

Charco El Ataud

Esta hermoso charco y refrescante cascada se encuentran en Adjuntas, cerca del Lago Garzas. El lugar es muy visitado. Su nombre se debe a que dicen que en las noches el río crece y desde la carretera parece un ataúd. Este pedazo de monte ofrece una hermosa cascada y saltos de agua que te llevan a piscinas naturales rodeadas de caminos de piedras. Se accede por la carretera 158, coordenadas 18 9′ 15.35′ N 66 44′ 24.03′ W.

Charco El Ataúd. (Suministrada)

Salto Curet

Esta fascinante cascada se encuentra al noreste del Bosque de Maricao. Es el destino obligado para los que visitan EL Monte del Estado. Debes ir preparado para una caminata unos 20 minutos en una vereda junto al río.. Aunque da trabajo llegar al lugar, si decides ir un sábado es casi seguro que tendrás esta maravilla solo para ti.

Salto Curet en Maricao. (Suministada)

Charca El Hippie y Cascada La Canoa

Tiene una roca gigante en el centro que la caracteriza. La formación de las piedras hacen una piscina natural. La charca está relacionada con la cascada que tiene forma de escalera y puedes apreciar al fondo del charco. Se encuentra en Naguabo y lleva su nombre ya que por el lugar hay una casa abandonada en la dicen vivía un hippie.

Cascada Canoa en el Hippie. (Suministrada)

El Chorro de Doña Juana

Este pedazo de paraíso queda entre Ciales, Orocovis y Villalba, justo al lado de la carretera 149. La impresionante caída de agua es de más de 100 pies de altura. Se estaciona justo al lado de la carretera y es común ver turistas así como boricuas en sus alrededores o dándose un chapuzón o pasando el día en familia.

El Chorro de Doña Juana. (Suministrada)

Charca Azul, El Trompo y Los Cabros (Cañón San Cristóbal)

Cañón San Cristóbal queda en el corazón de la cordillera central, entre Barranquitas y Aibonito. Un cañón es una formación topográfica que consiste de un paso estrecho y profundo entre montañas. Sus paredes son de roca escarpada y por su fondo transcurre corriente de agua. San Cristóbal tiene 9km. De largo y más de 500 pies de profundidad. Está bajo la administración del Fideicomiso de Conservación. Guarda un profundo secreto: si continúas el camino por la entrada del Fideicomiso y sigues adentrándote en la zona encontrarás tres charcas maravillosas y escondidas: Charca Azul, El Trompo y Los Cabros. Aventúrate. (necesitarás un guía preferiblemente del Fideicomiso).

Cañón San Cristóbal. (Suministrada)

Quebrada Juan Diego

Es el secreto mejor guardado del Bosque El Yunque, donde encontramos una gran cantidad y variedad de saltos de agua, ríos y riachuelos; algunos más conocidos que otros. A orillas de la carretera 191 se encuentra la cascada en la quebrada Juan Diego. Si caminan un poco más río arriba, encontrarán un impresionante salto de agua.

Quebrada Juan Diego. (Suministrada)