Sostienen suspensión de Roberto

La oficial examinadora de la Universidad de Puerto Rico (UPR) recomendó que se sostenga la suspensión sumaria del líder estudiantil Giovanni Roberto Cáez y la rectora de Río Piedras, Ana R. Guadalupe, acogió la recomendación mediante resolución publicada esta tarde.

La determinación coincidió con una expresión de insatisfacción de parte de los presidentes de 10 de los 11 recintos universitarios quienes sostuvieron hoy una reunión con la presidencia de la UPR y algunos de sus síndicos. En la reunión, según El Nuevo Día, la administración se comprometió a expresarle al Gobernador la deseabilidad de que los ingresos de impuestos nuevos creados por la Ley 7 sean tomados en cuenta.

«[P]rocede conservar la suspensión sumaria como estudiante del Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico del estudiante -querellado, Giovanni Roberto Cáez y la consiguiente prohibición de entrada a los predios e instalaciones universitarias hasta que se resuelva en forma final la querella», resolvió Guadalupe a la vez que detalló el nuevo proceso que se inicia y que conllevaría vistas formales en los próximos 30 días. El nuevo proceso estará a cargo del licenciado Edgardo Maldonado Maldonado, un ex juez municipal que intentó tener ascenso a superior.

«Vamos a defendernos con más evidencia… yo no puedo ser responsable de las acciones de todo el movimiento estudiantil. Yo soy uno», reaccionó Roberto a la vez que precisó que la administración no entiende que el movimiento estudiantil no tiene una jerarquía vertical. Añadió que atacarán también las repercusiones que tiene la suspensión en el sentido de que «implica el impedirme la entrada como ciudadano de Puerto Rico a la universidad».

Roberto dijo que se reservaría el contenido de las discusiones que ha tenido el movimiento estudiantil sobre el activar o reforzar medidas de disciplina interna para controlar lo que ocurre en manifestaciones públicas que ellos convocan.

La resolución, opinó por au parte el abogado de Roberto, Frank Torres Viada, «no tiene otro propósito que intimidar e intentar acallar al movimiento estudiantil».