El coronavirus y su consecuencia social
El exdirector de Manejo de Emergencias estatal, Heriberto N. Saurí, opina que el éxito y los esfuerzos de salvar vidas depende de cada uno de los ciudadanos.
En primera instancia quiero dar las gracias a NotiCel por la oportunidad de expresar mi pensamiento sobre asuntos que nos afectan como sociedad, desde la perspectiva de un ciudadano común, salubrista público y manejador de emergencias; con experiencias en la administración pública en las áreas municipal, estatal y corporaciones.
Hemos experimentado las consecuencias y el manejo de varios desastres, hoy hablaremos sobre el coronavirus y la lucha del gobierno contra las consecuencias de esta mortal enfermedad.
Es importante destacar que no hay cura para este nuevo virus; que no existe una vacuna para prevenirlo y que no hay la estructura o infraestructura dentro de los sistemas de salud para enfrentar de manera predecible sus consecuencias. Hay que reconocer, además, que no hay información sobre su mortalidad y la morbilidad.
Ante la ausencia de datos valiosos que podrían ayudar al gobierno federal, así como los estados y territorios como herramienta crucial para frenar esta enfermedad, el gobierno ha tomado las decisiones que mejor pueden prevenir la propagación del virus, incluyendo: informar al ciudadano de la forma de transmisión y medidas de protección personal; la implementación de órdenes ejecutivas para controlar la interacción y el contacto directo con focos de posible infección; reducir los lugares y actividades de mayor concentración de ciudadanos que no sean absolutamente necesarios para el diario vivir; los días que los comercios esenciales ofrecerán sus servicios y la forma y manera de operación.
Por otro lado, se ha incluido dentro de la toma de decisiones gubernamentales el grupo que representa el sector médico con la especialidad para mejor atender el coronavirus mediante la creación del "Task Force" del Recinto de Ciencias Médicas, el cual ha hecho sus recomendaciones y ha puesto de forma más visual la perspectiva de la salud pública en la implementación de políticas públicas del gobierno.
Sin embargo, toda acción que el gobierno ponga en marcha o trate de implementar, va a tener sus detractores con o sin razones válidas; con o sin información correcta; con y sin el análisis ponderado de la situación social en Puerto Rico.
Lo más preocupante de las acciones de estos grupos es que en el mismo centro estamos los ciudadanos particulares que con una u otra versión podemos confundirnos y quizás perder la confianza en el resultado de las acciones que se han implementado.
Lo cierto es que para cada acción gubernamental hay varias reacciones, y como consecuencia la confusión, desesperanza, depresión, y en algunos casos, coraje y rabia de los ciudadanos que puede generar en una resistencia a las medidas impuesta por el Estado.
Sin embargo, tenemos que estar claros en que las medidas que se han tomado están tímidamente dando resultados positivos, que al tener más pruebas de detección del virus es de esperarse un incremento en el número de casos confirmados, y que la forma que podemos reducir la propagación en la población dependerá de las acciones de cada uno de nosotros.
Por lo tanto, como único podemos atender esto, con la seriedad que merece y salvar vidas, dependerá en que las personas permanezcan en sus hogares y reducir el tiempo expuesto en los comercios que permanecen abiertos, protegerse en lugares públicos mediante el uso de guantes y mascarillas o tela como ha recomendado el CDC, evitar tocarse la cara, lavarse las manos con frecuencia y mantener la distancia en todo momento.
Se ha comprobado que en otros países estas medidas básicas están dando resultado y aquí no será la excepción.
Es por ello, que muy humildemente le solicito a los grupos que por alguna razón de análisis estén en contra de las acciones que ha tomado el gobierno y las medidas que sean necesarias añadir sobre la marcha, que hagan una pausa en sus expresiones para así evitar confundir al ciudadano con información y análisis que no es de consumo general.
Como ocurre en toda emergencia, las evaluaciones se hacen posterior a la misma y en ese momento se pueden hacer todos los señalamientos, opiniones, investigaciones y análisis pertinentes.
Les pido que nos enfoquemos en evaluar las medidas que estamos realizando individualmente, a nivel comunitario e institucional y hacer ajustes de ser necesario. El éxito y los esfuerzos de salvar vidas depende de cada uno de nosotros.