A la edad de 78 años, Carmen Calderón Ramos, una de las ancianas halladas bajo condiciones de maltrato y abandono en un hogar de Río Piedras, falleció hoy, miercoles, tras complicaciones en su salud.

A la hora de su muerte en Centro Médico, la septuagenaria de 4 pies y 11 pulgadas de altura, pesaba solo 67 libras. Sus propias condiciones de salud habían empeorado debido a infecciones y hasta desgarros musculares,complicaciones que a todas luces parecen haber surgido a raíz del régimen de maltrato físico, desnutrición y deshidratación al cual estaban sometidos los adultos mayores en el hogar Emanuel de Río Piedras.

La información la brindó la teniente Ana Rosario, directora de la División de Homicidios del Centro de Investigaciones Criminales (CIC). Parada frente la Sala de Emergencias de Centro Médico en Río Piedras, junto a otros dos agentes de la Policía, leía de un papel blanco donde tenía apuntado en tinta azul los datos más recientes del caso.

El próximo paso es que un patólogo de Centro Médico le haga la autopsia a Calderón Ramos para determinar oficialmente la causa de muerte. Si en efecto el fallecimiento está relacionado con el maltrato en el hogar, la querella que radique Fiscalía podría figurarbajo la categoría de homicidio.

‘Aquí se estaba investigando un maltrato físico de la institución. Al la persona fallecer, y tener unas condiciones de salud que se le complicaron con su estado porque esa persona estaba desnutrida, deshidratada, entiendo que está relacionado. Pero el fiscal por lo general espera a la causa de muerte para radicar, si va a radicar homicidio o lo que la fiscal entienda’, explicó la teniente.

Mientras tanto, la Policía ata los últimos cabos en la investigación. Ya se recuperaron vídeos dentro de la institución que destacan como evidencia de lo que ocurría en el interior del hogar ubicado en la calle Lombardia de la Urbanización Villa Capri, así como documentos que se han requerido mediante subpoenas. La persona encargada del hogar hasta ahora no ha emitido declaraciones.

‘La persona del hogar fue citada a nuestra oficina ayer y compareció acompañada de varios abogados. No quiso hacer ningún tipo de expresiones, se le hicieron las advertencias de ley y ella decidió permanecer en silencio’, expresó la teniente Rosario.

A su vez, en horas de la tarde, los agentes policíacos intentarían acudir a la residencia en San José, en Río Piedras,dirección que se atribuye a la fenecida, para intentar dar con el paradero de sus familiares. Hasta ahora, del teléfono de contacto al que han llamado no han obtenido respuesta.

Precisamente, la desconexión de los familiares con el cuidado de sus familiares de la tercera edad así comola necesidad de una fiscalización más sólida a los hogares de ancianos, son algunos de los principales problemas que han emergido a la luza raíz de este incidente, pero que día a día afectan a las poblaciones de mayor edad.

Hasta el momento, solo dos de los ancianos llevados a Centro Médico han sido dados de alta. Los siete restantes permanecen recluidos por sus condiciones de salud.

Parado frente a la teniente, el agente Rivera, quien atendió el caso desde que recibieran la querella el domingo pasado, ratificó que los ancianos se hallaban en un débil estado de salud. Cuando llegó al hogar ya los paramédicos estaban atendiendo a los más frágiles. De ellos, la más delicada era doña Calderón Ramos, cuya vida se apagó en el día de hoy.