También sobrevivió los terremotos de 1918.

Doña Isabel Cruz Custodio, de 105 años de edad y quien sobrevivió los terremotos del 1918, también experimentó en carne propia otro momento histórico que aún recuerda y relata con sorprendente claridad: la pandemia de la gripe en 1918, conocida como el Spanish Flu.

Entre varios relatos, que van de lo jocoso a lo folclórico, Doña Isabel contó como un espiritista daba sus recomendaciones para deshacerse de la gripe.

«Que hicieran teses de hierbas… le echaban jugo de naranja o de limón. Entonces hacían esos teses y se los daban a la gente. Y no se murió nadie en Caguana (Utuado) más que un solo hombre, que fue al doctor. Las otras gentes no nos morimos nadie», dijo.

Hizo referencia también al distanciamiento social, pues habló de «Mamá» y cómo, en sus recuerdos, esta se encontraba en una habitación con una bebé recién nacida y no se les acercaba nadie para evitar el contagio de gripe.

«Nosotros estábamos sin ver a mamá… un día mamá salió a la sala y estaba Ponchy, mi hermano, y empezó a tapar rajitas con papeles… para que a mamá no le diera un viento», contó entre risas.

Doña Isabel ya había compartido sus experiencias con NotiCel tras los temblores que se registraron a partir de diciembre del año pasado, donde contó cómo pasó el terremoto de 1918 en los brazos de sus padres.

«Entonces, la casa pues se movía, pero esas casas de antes las hacían bien buenas, bien hechas y no se cayó la casa. Papá le creyó [a mamá] que la casa se nos venía encima, que nos mataba. Mi papá nos cogió los brazos y nos cogió y nos abrazó, porque dijo ‘aquí nos vamos a morir y entonces vamos a morir juntos’. Creyó él que la casa se nos venía encima. Y pasó el temblor’, relató.

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