Cuando viajamos nos invade un entusiasmo natural anticipando el disfrute de conocer el lugar que escojamos. Las vacaciones son ese tiempo libre que reconoce el arduo trabajo de uno o varios años. Pero en medio de ese merecido esparcimiento, tambien pueden sorprendernos los accidentes.

Mis padres retirados decidieron ir a visitar a mi hermana a Italia, lugar donde vive con su familia. Estarían tres meses en Europa, visitando lugares y descansando, algo que pueden hacer sin prisa los retirados, o claro, los millonarios.

Compré los pasajes a través Internet, y al momento de la compra me ofrecieron un seguro de viaje. El costo de $142.00 por el término de duración del viaje, y por ambos pasajeros, lo encontré razonable. Además, la póliza cubría accidentes, enfermedad, gastos legales, transportación al lugar de origen, entre otros. A pesar que viajo con frecuencia, y siempre compro este tipo de seguro en mi carácter personal, pensé si en esta ocasión lo compraba para ellos. Por suerte, lo adquirí, y fue el mejor regalo de viaje para mis progenitores.

A la semana de haber llegado a Italia, mi padre se cayó y se fracturó el fémur. Hubo que trasladarlo a un hospital en el cual estuvo recluido durante un mes. Incluso, le realizaron una operación, y posteriormente hubo que trasladarlo a Puerto Rico con una escolta médica, ya que nunca recuperó lo suficiente y no podía seguir hospitalizado.

Aún recuerdo como si fuera hoy la llamada de mi hermana, para contar lo sucedido. Lo primero que me dijo fue que el hospital requería un adelanto de 5,000 euros ó $6,893.00 aproximadamente. De más está decir que la noticia fue alarmante, pero enseguida nos acordamos del seguro que se había adquirido, y se procedió a llamar.

Desde el momento en que nos comunicamos la compañía se hizo cargo de todo el manejo del caso, desde hablar con personal del hospital, y garantizar el pago de los servicios sin que tuviéramos que desembolsar dinero alguno. Asimismo, la compañía de seguros ofreció un servicio de traducción ya que sólo hablaban italiano en el hospital, pero mi hermana sirvió de intérprete. La operación y la estadía de un mes en el hospital costó $17,000.

Mi padre tuvo que ser trasladado a Puerto Rico con una escolta médica en un vuelo comercial, es decir, una enfermera especializada viajó desde Venecia. Esto conllevó comprar nuevos boletos en otra aerolínea que tuviera disponibilidad. Debido a su condición y el espacio que necesitaba para un viaje tan largo, hubo que comprar los boletos en primera clase para mi padre y la enfermera. El traslado se tradujo en $23,000 adicionales, cantidad que también fue cubierta en su totalidad por el seguro.

A partir de esta experiencia hemos aprendido a que jamás viajaremos sin seguro. Aún nos preguntamos qué habría pasado de no haber pagado esos $142.00. El total de $40,000 fue la cantidad mayor, sin contar otros gastos diarios que hubo durante ese mes, y luego otros tantos más que surgieron a la llegada a Puerto Rico. Es por ello que siempre insto a otros a presupuestar un seguro de viaje si planifica unas vacaciones.

Hay múltiples alternativas en el mercado para adquirir una póliza. Entre las compañías que ofrecen este tipo de cobertura esta AIG con su producto Travel Protection Passport. Además cualquier compañía como Triple S, Cooperativa de Seguros Múltiples, entre otras, ofrece un producto conocido como Asistencia en Carreteras, que incluye una cubierta en viajes por el mismo precio que usted paga de la póliza.

Estas cubiertas suelen ser limitadas, y el pago de los gastos es reembolsable. En el caso de AIG, ofrecen diversos planes que van a depender de la inversión que quiera hacer.

En mi caso, la compañía que aseguró a mis padres fue Allianz, que aunque no tiene licencia para vender seguros en Puerto Rico, posee una alianza con algunas aerolíneas como Delta y Jet Blue, que exige ofrecer dicho seguro a todo viajero que compre los boletos aéreos en su página cibernética. De este modo, adquiere su boleto a la par del seguro tan pronto concreta la transacción. Si compra el boleto y no compra el seguro a la vez, luego no lo podrá adquirir.

Si desea obtener más información sobre seguros de viaje en Puerto Rico podrá obtenerla a través de sus portales, o llamar localmente para que les envíen la misma. Recuerde que si está planificando el viaje de sus sueños, esta porción es parte de los gastos del viaje. Más vale precaver que tener que remediar, así podrá viajar tranquilo y disfrutará sus vacaciones sin preocupaciones.