Las PYMEs sienten el golpe
A las pequeñas y medianas empresas no se las ha permitido abrir, contrario a las megatiendas, que se han mantenido operando durante la cuarentena.
El secretario del Departamento de Desarrollo Económico y Comercio (DDEC), Manuel Laboy Rivera, aseguró que serían las Pequeñas y Medianas Empresas (PYMEs) las que requerirán de mayor asistencia en la implementación de las guías y los protocolos de cuidado ante el coronavirus COVID-19, tras la apertura condicionada de nuevos comercios.
La apertura está contenida en la nueva Orden Ejecutiva de la gobernadora Wanda Vázquez Garced, que extiende el toque de queda hasta el 25 de mayo, pero permite que comercios e industrias de menor riesgo abran sus puertas.
Como parte de los requerimientos para abrir, los negocios deberán enviar una auto-certificación al Departamento del Trabajo que especifique el cumplimiento con las medidas de protección de contagio.
Lo mínimo que deben hacer los patronos, de acuerdo a la Orden Ejecutiva, es instruir a sus empleados de las nuevas medidas, consignar que se laven las manos por 20 segundos con jabón o utilicen desinfectante y porten mascarillas y guantes.
En entrevista con NotiCel, Laboy Rivera aludió a que las PYMEs tendrán dificultad debido a su desventaja económica, por lo que incluiría un borrador de las guías en el portal del DDEC.
No obstante, el agravio de las PYMEs en este contexto yace en que no han recibido el permiso para operar, pese a que tienen la capacidad de controlar con mayor efectividad el flujo de clientes y proteger a sus empleados conforme a las guías de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades y Administración federal de Seguridad y Salud Ocupacional, a toda vez que se ha permitido una competencia desleal.
“Eso de auto-certificarse, puedo entender que es responsabilidad del patrono proteger a los empleados y los clientes, que tengan guantes, mascarillas, hand sanitizer, que se tenga un protocolo, todos tienen que lavarse las manos. Entiendo que van a cumplir con eso y no habrá objeción. Más allá de eso, depende el tipo de negocio, porque no es lo mismo que abra una manufacturera que tiene a 50 personas en un mismo lugar, que una tienda que es operada por su dueño a la que entra un cliente a la vez”, planteó Jorge Argüelles Morán, presidente del Centro Unido de Detallistas (CUD).
Argüelles Morán argumentó que las PYMEs son las que mueven la economía del país.
En 2015, un estudio de la Compañía de Comercio y Exportación reveló que las pequeñas y medianas empresas representaban el 95 por ciento de los negocios en la Isla y generaban el 43 por ciento de los trabajos en el sector privado. También aportaban en promedio un 12.6 por ciento al producto interno bruto (PIB).
Pese a su contribución a la economía, no se las ha permitido abrir, contrario a las megatiendas que han operado y vendido diversidad de productos, aun en el periodo de la cuarentena implementada para detener el avance el coronavirus y cuando solo se permitía vender artículos esenciales.
“Yo quiero que todo el mundo venda, pero no puedo estar de acuerdo en que una megatienda venda televisores, ropa, cuanta cosa hay, pues mis comercios que tienen menos riesgo no se les permite trabajar en estos momentos. Cuando les toque abrir, ya las megatiendas habrán absorbido todo lo que se iba a comprar en este tiempo”, señaló Argüelles Morán.
El Presidente del CUD también lamentó que estos comerciantes no han recibido las ayudas económicas prometidas por el gobierno federal y estatal, lo que ha provocado una merma en los ahorros de las PYMEs, con lo que coincidió Liliana Cubano, presidenta de la Asociación de Productos de Puerto Rico.
“A nivel de nuestros socios, lo que más hemos visto es la necesidad de las ayudas. Lo que es el ‘Paycheck Protection Program’, que en la primera tirada muy pocos cualificaron, el dinero se gastó muy rápido. Es ‘cash flow’ lo que van a necesitar. Muchos estamos pagando sueldos a empleados para no perderlos, pero no estamos generando dinero”, expresó Cubano.
Cubano indicó que algunas empresas se han visto en la obligación de diversificarse y establecer alianzas con otros comercios para la venta de productos de primera necesidad durante la pandemia, como hand sanitizers, pero desconoce cuántos no podrán reabrir si se les permite hacerlo a fin de mes.
Durante su mensaje, la Gobernadora aludió a que entre el 18 y 25 de mayo se anunciarían nuevas empresas que podrían integrarse a la reapertura.
De acuerdo a Cubano, farmacias y estaciones de gasolina han solicitado operar nuevamente los domingos, mientras que otros se han movido hacia las ventas por internet.
"Los pequeños negocios que están vendiendo son los que tienen acceso a e-commerce. Nosotros la abrimos (la cuenta) hace como dos semanas y las ventas han sido muy buenas, no solo local sino para exportar", aseguró la empresaria.