Peter John Ramos cambia la cancha por el cuadrilátero
El exbaloncelista tendrá un rol estelar en una cartelera de lucha libre este sábado en Juana Díaz.
Tras más de veinte años como baloncestista, y en cuyo tiempo jugó en España, China y Filipinas y representó a Puerto Rico en Juegos Olímpicos y Mundiales, el expivot Peter John Ramos cumple un sueño de pequeño: ser luchador.
"Siempre ha sido mi pasión", aseveró Ramos a Efe un día previo a su participación en el evento "Beast Mode Chistmas Show" en el Coliseo Dolores Martínez de Juana Díaz.
"La Bestia", nombre de luchador de Ramos, subirá al cuadrilátero como compañero del también puertorriqueño Apolo.
Estos chocarán con los "Sons of Samoa" (Afa Jr. y Alofa de Samoa), con un árbitro especial.
El nombre de pareja de Ramos y Apolo es "Beast Mode".
La oportunidad para que Ramos abandonara el baloncesto y lograra su sueño, surgió luego de jugar cinco partidos en el Baloncesto Superior Nacional en la temporada 2020 y llegara la pandemia del Covid-19.
"Ahí yo dije: 'espérate, llevo 20 años jugando y le he dedicado mucho tiempo a mi país'", relató.
Eso llevó a Ramos a despedirse de las canchas e irse al estado de Florida y entrenar para convertirse en luchador bajo la dirección de Apolo.
Y tras unos cuatro meses de entrenamiento, los organizadores del cartel del sábado, la Organización Internacional de Lucha (Puerto Rico) y Robles Promotions, compañía promotora con base en Texas y México, le ofrecieron la oportunidad de luchar en rol estelar.
Una característica de Ramos, de 36 años, que predomina sobre los demás luchadores es su altura: 7'3'', lo que lo incluiría entre otros gigantes y leyendas del deporte, como Andre The Giant, Big Show, Kane o Undertaker.
"La única diferencia que tengo con algunos de ellos, es que no se movían. Yo soy atleta, yo me muevo y por eso estoy llamando la atención ahora mismo", aseguró Ramos.
Y para mostrar sus habilidades atléticas sobre el cuadrilátero pese a su altura, Ramos dijo que es capaz de tirarse sobre su oponente desde la tercera cuerda, truco hábil que los luchadores altos no han intentado hacer.
"Yo quiero hacer cosas que ningún hombre grande haya hecho", resaltó.
"Ahora mismo, simplemente quiero hacer cosas que nunca se han hecho. (El deporte) quiero dominarlo, ser uno de los pocos en dominar la lucha libre y quedarse con el canto", abundó.
Ramos, a su vez, admitió que el jugar baloncesto es "más difícil" que luchar.
Un "peor" ejemplo que dio para comparar fue el correr de un lado de la cancha a otra seis veces seguidas en menos de 30 segundos.
"El baloncesto es mucho más fuerte", indicó Ramos, quien empezó en el deporte de la canasta a sus 15 años bajo el entrenador puertorriqueño Leo Arill.
Desde ese entonces, representó a Puerto Rico en las selecciones nacionales juveniles hasta llegar a la adulta.
Y en todos esos años fue compañero de equipo y de cuarto del base José Juan Barea, también con experiencia internacional en España y en la NBA.
"Fue una trayectoria súper grande representar a mi país, no solo en la selección, sino como refuerzo en China y Filipinas. Siempre ha sido un honor llevar a mi país en el pecho", dijo.
El evento deportivo del sábado incluirá la participación del exmiembro de la WWE Alberto Del Río, entre otros luchadores mexicanos, como Texano Jr., La Máscara y Cibernético.