LeBron James: a la casa de Michael Jordan
Con su cuarto trofeo de Jugador Más Valioso de la serie final de la NBA, se coloca a dos de los alcanzados por la leyenda de los Bulls de Chicago.
LeBron James sigue con su objetivo de superar a la gran leyenda Michael Jordan dentro de la historia del baloncesto de la NBA y anoche dio un paso más al conseguir su cuarto título de campeón y premio de Jugador Más Valioso (MVP) de las Finales.
Lo hizo después de que los Lakers de Los Ángeles vencieran por 106-93 al Heat de Miami en el sexto partido de las Finales de la NBA que ganaron por 4-2 al mejor de siete.
Una vez más, James fue la gran figura que guió a los Lakers a su decimoséptimo título de la NBA, empatados con los Celtics de Boston, como los mejores de la historia, en apenas su segunda temporada con el equipo angelino.
Acabó el partido con un triple-doble de 28 puntos, 14 rebotes y 10 asistencias, en lo que fue el undécimo que consigue en las Finales de la NBA, nueva marca de todos los tiempos.
El alero, de 35 años, quien anteriormente ganó el MVP de las Finales en 2012 y 2013 con el Heat y en 2016 con los Cleveland Cavaliers, es el primer jugador en la historia de la NBA en ganar el premio con tres franquicias diferentes.
Tras recibir el trofeo, James destacó que su único objetivo fue prepararse para conseguir el título y ser el ejemplo a seguir por sus compañeros para que al final todos se sintiesen orgullosos como cada vez que ha conseguido los títulos.
Al ganar su cuarto premio MVP de las Finales supera a Magic Johnson, Tim Duncan y Shaquille O'Neal y se coloca en el segundo lugar de todos los tiempos, solo por detrás de Jordan, quien ganó el premio seis veces.
James culminó su 17 temporada en la liga con una carrera virtuosa a lo largo de la postemporada, lanzando más del 50 % en los tiros de campo y al mismo tiempo dirigiendo la ofensiva de los Lakers prácticamente en cada posesión que tuvo en la cancha.
También mostró un compromiso en el otro extremo de la cancha, jugando un papel clave en una unidad defensiva sofocante.
Lo más importante es que James superó al alero Jimmy Butler en lo que fue un enfrentamiento que sólo tuvo algo de interés cuando la propia estrella de los Lakers lo permitió, lo demostró que en los momentos decisivos y el partido importante el nuevo jugador franquicia de los Heat desapareció.
Gracias a LeBron James, los Lakers también tienen su campeonato número 17 de la NBA, el primero desde 2010, cuando lo ganó Kobe Bryant y el español Paul Gasol, y empatan con los Celtics de Boston como los mejores de todos los tiempos.
Aunque James fue decisivo, la presencia del pívot Anthony Davis, fichado el verano de 2019 por el gerente general de los Lakers, Rob Pelinka, también hizo la diferencia a la hora de conseguir el título.
Sin contar con el hundimiento en las semifinales de la Conferencia Oeste de los Clippers de Los Ángeles, que se dejaron arrebatar una ventaja de 3-1 ante los Nuggets de Denver, que fueron los finalistas que nunca pudieron con los Lakers.
James reconoció que sin la presencia de Davis no hubiese sido posible luchar por el título, como le sucedió en la primera etapa con los Cavaliers y de ahí que decidiese irse a los Heat para lograr sus dos primeros títulos con la ayuda de Dwyane Wade y Chris Bosh.
"Anthony confió en mí y yo en él por lo que al final pudimos hacer juntos un mejor baloncesto individual y de equipo", destacó James, que se convierte en el segundo jugador más veterano que gana el premio de MVP de las Finales de la NBA y el cuarto con más de 35 años.
El primero fue Kareem Abdul-Jabbar (38 años y 54 días, en 1985), seguido de James (35 años y 286 días, 2020), Wilt Chamberlain (35 años y 260 días, en 1972) y Jordan (35 años y 117 días, en 1998).
El cuarto campeonato de James le da más anillos que a cualquier otro jugador activo y lo coloca a un título de un grupo de 13 jugadores que han ganado cinco, incluidos Johnson, Duncan y el fallecido Kobe Bryant.
Ahora solo tendrá que convencer a Davis para que permanezca con los Lakers y le ayude a que tenga la oportunidad de mantener vivo el objetivo y el sueño de superar a su gran ídolo de infancia, el legendario Jordan.