Oro y plata de PR en el tenis de mesa mixto
No hubo nombres, ni equipos, tampoco mentores. Era Puerto Rico. Y despues de la espectacular remontada de la dupla de Adriana y Afanador, el Centro de Eventos Puerta de Oro en Barranquilla albergó solamente a boricuas que apoyaron a cada uno en sus puntos.
La dupla de Adriana Díaz y Brian Afanador revalidaron su oro centroamericano al derrotar 3-2 a Melanie Díaz y Daniel González, que se agenciaron la medalla de plata en la modalidad de dobles mixtos.
Los medallistas se reunieron en la zona mixta, donde se ponen a disposición de la prensa para hablar de las ejecutorias. No obstante, una conmovida Adriana optó por continuar su camino mientras dejaba ir las lágrimas tras lo acontecido y luego de hablar al país a traves de las pantallas chicas.
Nadie puede decir que no se luchó. Ambas parejas intercambiaron puntajes mientras la mayoría de los espectadores se limitaba a observar. Esos que se quedaron eran pocos tras la eliminación del anfitrión. El dúo de Melanie y Daniel se llevaron el primer juego con marcador 11-7.
Distinto al anterior, los ganadores llegaron a estar abajo en el segundo juego 2-6. Luego de eso, cayeron más profundo 5-10 y Adriana selló el juego 11-5. De parte y parte, se pedían disculpas por los fuertes raquetazos.
La riña deportiva regresó para el tercer juego. Tras el empate a ocho, Melanie y Daniel asumieron el comando 9-8 y con otro punto adicional tocaban las puertas de la victoria. Lo acabaron 11-9 despues que Adriana y Brian demostraran vida por unos instantes.
Durante el cuarto juego, en escapada se fueron Adriana y Brian con marcador 10-2. Melanie y Daniel consiguieron tres puntos antes de que sus contrincantes bajaron el telón 11-5.
El drama no podía ser mejor. La intensidad en sus gritos tras conseguir puntos evidenciaba que las dos parejas querían colgarse el oro centroamericano. Fue escalando mientras se adentraban más en acción. Ambos conjuntos empataron a seis y luego a siete, en una espectacular jugada de Melanie defendiendole un ataque a su hermana, Adriana.
Tras el empate, un punto adicional fue todo lo que Melanie y Daniel consiguieron. El final se quedó 11-8. Como cualquier juego y otro rival, las parejas se abrazaron y procedieron con el respeto deportivo. Saludándose uno al otro y no hubo celebraciones como las que se acostumbran a ver, sino el sonoro aplauso para los competidores.