Quizá los Óscar, los Globos de Oro o los Goya tengan que adaptarse a una pasarela virtual.

MADRID – La entrega de los premios Emmy, los más importantes de la televisión americana, han marcado el inicio de una temporada de galardones que podrían copiar muchos de los cambios impuestos por la COVID-19, entre ellos el desfile de estrellas por la alfombra roja.

Quizá los Óscar, los Globos de Oro o los Goya tengan también que adaptarse a una alfombra roja virtual donde las actrices celebren en su casa y con amigos haber recibido un galardón luciendo las mejores galas.

Ese ha sido el caso de Zendaya, que con 24 años se ha convertido en la más joven en llevarse el premio a la mejor actriz de serie dramática por su papel en «Euphoria», una serie que ha marcado un antes y un después en la visión de la juventud.

La actriz lució un favorecedor modelo que completó con espectaculares joyas de Bulgari, firma de la que es imagen, en concreto con un collar de alta joyería de piedras preciosas de colores con pendientes de diamantes y una variedad de anillos de alta joyería de diamantes y esmeraldas.

Complementos para un primer look, pero Zendaya, como en las mejores galas, se cambió de vestido que adornó también con exclusivas joyas.

Jennifer Aniston, que precisamente optaba al mismo premio que Zendaya, sí acudió a la gala, pues presentaba algunos de los premios junto a Jimmy Kimmel. Un acto para el que optó por un vestido negro, de tirantes y discreto escote en V, muy elegante.

Reese Witherspoon coprotagonista junto a Aniston en «The Morning Show», decidió celebrar la gala en su jardín con una copa de champagne y un escotado vestido negro, con dos lazos sobre los hombros.

En azul eléctrico, con un diseño de Shiaparelli, Regina King, ha sido la elección de la ganadora a la mejor actriz de serie limitada por «Watchmen».

Otra de las ganadoras, Julia Garner, que se alzó con el premio a la mejor actriz de reparto de serie dramática por «Ozark», la serie sobre crímenes creada por Bill Dubuque y Mark Williams, esperaba sentada en su cama y con una gorra con el nombre de la serie, para atraer a la suerte, con conjunto en seda de pantalón y top en color crema, con varias vueltas de collares de perlas al cuello.

Annie Murphy, ganadora del premio a mejor actriz de comedia por «Schitt’s Creek», optó por conocer el resultado en un hotel rodeada de amigos y familia, un momento en el que lució un traje de chaqueta negro que combinaba con una blusa con transparencias y su larga melena recogida en una coleta.

La sobriedad ha sido la nota dominante en una gala en la que se han reinventado incluso la manera de entregar los premios.