Un doble discurso.

Así sostiene María Lara Fontánez, presidenta de la Federación de Maestros de Puerto Rico (FMPR), que tiene el gobernador Alejandro García Padilla, con los maestros de cara a una reforma al Sistema de Retiro de Maestros (SRM).

Y es que Lara Fontánez condena que por un lado el Primer Mandatario le haya dicho a los grupos magisteriales en recientes reuniones en La Fortaleza que todavía no tiene elaborado un proyecto de ley para atender la situación económica del SRM. Pero, por otra parte, el equipo fiscal de esta administración promete a los inversionistas que antes de que finalice este año el Ejecutivo presentará su plan, que pudiera ser similar al implantado en el Sistema de Retiro Central con la recién aprobada Ley 3.

Ante esto, la Federación ha emplazado al Gobernador para que le explique a los maestros cuáles son sus propuestas para reformar el SRM. Incluso esperan reiterar su posición en una marcha convocada para el próximo 3 de noviembre a las 11:00 a.m. desde las inmediaciones del Capitolio hacia La Fortaleza.

A preguntas de NotiCel, señaló que durante la reunión que sostuvo la Federación el pasado 11 de octubre con García Padilla, éste les dio respuestas ‘ambiguas’ sobre cuáles son las medidas que se están contemplando. Lo más concreto que les afirmó el Gobernador a la organización magisterial, ‘era que estaban auscultando el transformar nuestro sistema de retiro de un sistema de beneficios definidos, como es actualmente, a un sistema de contribución definida, y eso no es otra cosa que una Ley 3’.

De otro lado, Lara Fontánez dijo que en esta última reunión con el Gobernador le propusieron que este creara una Comisión Especial para buscar alternativas para el SRM. Dicha entidad estaría compuesta por representantes del Gobierno y los grupos magisteriales, pero este no estuvo de acuerdo.

Se le preguntó por qué García Padilla se negó a crear la Comisión a lo que la líder sindical sostuvo que este ‘alegó que ellos estaban haciendo su estudio, que no había nada concreto y que lo que se iba a hacer era seguir auscultando nuestras opiniones. Sabemos lo que significa auscultar opiniones. En realidad no es un proceso participativo real, en donde las partes involucradas aporten en la solución de los problemas. Y realmente lo que nos esperamos es que nos impongan unas medidas que no vamos a favorecer y que el magisterio va a rechazar contundentemente’.