Sobrevive gran parte de la Reforma Laboral de 2017
Columna del exsecretario del Trabajo y exasesor legal de AAFAF, el Lcdo. Carlos J. Saavedra Gutiérrez.
El lunes el Gobernador anunció que firmó el Proyecto de la Cámara 1244 (PC 1244). Aunque algunos sectores han llamado a ese proyecto otra “reforma laboral”, la realidad es que no lo es. Y es que lo que comenzó a principios de 2021 como una medida legislativa para derogar por completo la Reforma Laboral del 2017, culminó siendo un proyecto muchísimo más discreto, enfocado en unas enmiendas puntuales a algunas leyes laborales.
En Puerto Rico, el uso del término “reforma” lo tendemos a utilizar para cualquier medida legislativa que enmienda una ley. La realidad es que una “reforma” ocurre cuando la asamblea legislativa, con la anuencia del Gobernador, aprueban un estatuto que altera la manera en que se concibe el ordenamiento legal sobre determinado asunto. Con una reforma se cambia la manera de interpretar las leyes, la razón por la cual estas se aprueban y la manera en que el gobierno interviene con determinado sector. Por eso, la reforma laboral llevada a cabo hace ya cinco años fue una verdadera reforma: no fue un mero conjunto de enmiendas técnicas a estatutos laborales, sino que fue un esfuerzo de redefinir la manera en que los estatutos laborales son interpretados y puestos en vigor. En específico, la Reforma Laboral de 2017 perseguía cuatro principios fundamentales: reducción de costos laborales, la flexibilización de las relaciones obrero-patronales, modernizar el esquema regulatorio laboral y crear nuevos derechos para la clase trabajadora. Todos estos principios fundamentales sobreviven al PC 1244 e, incluso, algunos son hasta reafirmados. Esto demuestra el valor de la Reforma Labora del 2017 y explica porque la Asamblea Legislativa actual se retractó de derogarla por completo y acabó aprobando una medida mucho más aguada.
Comencemos con el principio de reducción de costos laborales. Aunque el recién firmado PC 1244 ciertamente contiene disposiciones que aumentarán los costos de hacer negocios en Puerto Rico como, por ejemplo, aumentos en la tasa de acumulación de licencia de vacaciones y la expansión de ese derecho a grupos de empleados que nunca lo habían tenido, la realidad es que muchas de las disposiciones de la Reforma Laboral de 2017 que buscaban reducir costos laborales en al Isla sobrevivieron. Por ejemplo, la reforma de 2017 derogó por completo la ley de cierre y la paga doble en la mayoría de los casos. Las enmiendas propuestas por el PC 1244 no restituyen ninguno de esos estatutos y no expandió las instancias en las cuales se compensa a los empleados doblemente. Por último, los topes en compensación a los que pueden quedar expuestos los patronos en ciertas reclamaciones laborales de discrimen también quedan inalterados.
En cuanto al principio de flexibilizar las relaciones obrero-patronales, el PC 1244 ratifica muchas de las enmiendas introducidas por la Reforma Laboral de 2017. Por ejemplo, el concepto del flexitime que se introdujo en el 2017 queda inalterado en el PC 1244, confirmando así que fue una enmienda correcta y favorable para nuestro ordenamiento cuando fue introducida en 2017. También quedan inalteradas las disposiciones en cuanto a acuerdos para reposición de horas, mediante los cuales patronos y empleados pueden pactar que empleados trabajan más de ocho horas al día sin la necesidad de pagar horas extra. Por último, el periodo probatorio no regresa a 3 meses, como lo era antes del 2017, sino que se reduce de 9 a 6 meses en la mayoría de los casos. Esto es un reconocimiento legislativo que el periodo probatorio que existía previo al 2017 no era suficiente para la relación obrero-patronal.
Por otro lado, la gran mayoría de las enmiendas introducidas en la Reforma Laboral de 2017 dirigidas a implementar el principio de modernizar el esquema regulatorio laboral quedan inalteradas con la aprobación del PC 1244. Por ejemplo, la manera en que se computa el pago de horas extras continúa siendo bajo el esquema introducido en el 2017 de “días calendario” y continúa pagándose a tiempo y medio en la mayoría de los casos. A su vez, quedan vigente el Capítulo 2 de la Reforma Laboral de 2017, el cual cambió la manera de interpretar el derecho laboral en Puerto Rico. Por ejemplo, quedan vigentes enmiendas del 2017 introducidas para fomentar la flexibilización de cómo se genera el contrato de empleo, la aceptación de firmas electrónicas para notificaciones a empleados e incluso para la formación de la relación de empleo, la presunción para la figura del contratista independiente, y el establecimiento de los deberes de los empleados hacia sus patronos. Quedan también esencialmente inalteradas las secciones de la Reforma Laboral de 2017 que cambian la manera de interpretar el derecho laboral en Puerto Rico. Por ejemplo, sobrevive el requisito introducido en 2017 en cuanto a que se deben interpretar de manera consistente las leyes locales y federales que sean análogas. También sobrevive el mandato legislativo de que debe darse deferencia a la interpretación patronal de sus políticas y normas internas, siempre y cuando el patrono se reserve tal potestad. Todos estos cambios introducidos en el 2017 son el verdadero corazón de la Reforma Laboral y quedan esencialmente inalterados con la firma del PC 1244. Incluso, algunos de estos conceptos han quedado ratificados.
Por último, los nuevos derechos laborales introducidos en el 2017 también sobreviven. En ese sentido, la expansión de derechos a las madres lactantes que sean empleadas, el flexitime, el derecho a acomodo religioso y el trato contributivo a ciertos beneficios que reciben los empleados también quedan inalterados.
Por todo lo anterior, los cambios que introduce el PC 1244 al ordenamiento para nada derogan la Reforma Laboral de 2017. Es por eso que no debe sorprendernos que algunas delegaciones de partidos políticos que han pedido la derogación de la Reforma Laboral de 2017 votaron en contra del PC 1244. Otra vez, lo que comenzó como un esfuerzo para derogar la Reforma Laboral de 2017, se estrelló por completo.
Y no es para menos. Luego de huracanes, terremotos, pandemias, inflación y recesiones durante los últimos 5 años, la realidad fáctica es que el mercado laboral de Puerto Rico hoy está mucho más sólido que en 2017. Cuando se aprobó la Reforma Laboral, la tasa de desempleo estaba en 11.8 por ciento; hoy está en 6.2. Para entonces, la tasa de participación se encontraba en 40.6 por ciento; hoy está en 43.6. En enero de 2017 había aproximadamente 990,000 personas trabajando en Puerto Rico; hoy son 1,134,000, lo que representa 144,000 más que hace cinco años. Aumento parecido se puede observar en el empleo asalariado no agrícola: en enero de 2017 eran 889,100 puestos asalariados; hoy son 915,800. Esto puede explicar porque la Asamblea Legislativa no aprobó la derogación total de la Reforma Laboral de 2017, y terminaron incluso ratificando gran parte de sus disposiciones.
El recién firmado PC 1244 entra en vigor en 30 días para muchos patronos en Puerto Rico. No hay duda de que esto conllevará un aumento en los costos laborales en Puerto Rico a raíz de algunas de las enmiendas que hemos discutido. Estará por verse si eso afecta la recuperación económica que hemos observado en estos meses, particularmente ante el reto de la inflación y los aumentos en los costos de energía. Además, está por verse si la Junta de Supervisión Fiscal impugna la nueva ley, como ya ha adelantado. Pero de lo que no queda duda es que con la firma del PC 1244, no se derogó la Reforma Laboral de 2017.