Presentan deficiencias de infraestructura y problemas con el acomodo de estudiantes de educación especial.

Salones con acondicionadores de aire dañados, proyectos de construcción a mitad y contratiempos en el acomodo de estudiantes de educación especial, fueron algunos de los hallazgos registrados en una vista ocular de la Cámara de Representantes en tres escuelas de Toa Baja.

La investigación de campo fue dirigida por la representante Deborah Soto, quien por 18 años se desempeñó como maestra en el sistema público, precisamente en Toa Baja. Soto, quien es legisladora por dicho pueblo, hizo el recorrido por las escuelas Efraín Sánchez Hidalgo, Francisco Dávila Semprit y Luis M. Santiago junto al representante José Bernardo Márquez, del Movimiento Victoria Ciudadana,

Soto se concentró en el estado de las facilidades y la preparación de los docentes, específicamente los que atienden niños pertenecientes al programa de educación especial, como por ejemplo, niños con diagnóstico de autismo.

“Muchos directores han presentado la solicitud y no han recibido a esa persona que debe estar atendiendo, en ayuda individualizada, a los estudiantes de educación especial. Muchos de los salones cuentan con Título 1 atienden al grupo completo, pero no individualmente a los estudiantes particulares”, declaró Soto en entrevista telefónica con NotiCel.

El propósito del programa de Título 1 es proporcionar a todos los niños una educación justa y equitativa reforzando las materias a los estudiantes con condiciones y/o necesidades especiales.

Sobre la preparación del personal docente, Soto señaló, al referirse al escenario que se repite en el sistema público de enseñanza, que “hay muchos maestros que aunque sí cuentan con la preparación de educación especial, no cuentan con un certificado o una especialidad en autismo. Muchos de los padres están en busca de que haya un maestro preparado en esa área de autismo para que le puedan brindar el currículo este que le corresponde”.

Un caso que llamó la atención de la presidenta de la Comisión de Educación al visitar las escuelas, fue el de dos madres de la escuela Efraín Sánchez Hidalgo, que pidieron un acomodo para sus hijos de la corriente de educación especial. Estos ya sobrepasaron la edad para el grado que están por lo que su tamaño los hace estar incómodos en salones para niños más pequeños. Soto no brindó más detalles sobre el asunto.

La legisladora también encontró que los aires acondicionados en los salones de kinder a tercero en la Sánchez Hidalgo no funcionaba. Allí, según indicó, los estudiantes y los maestros se exponen a altas temperaturas.

“Los niños están recibiendo educación física adaptada. Necesitan que se integren lo que es la música y las bellas artes. Muchos, dependiendo del grado, reciben (la clase de) salud…los maestros están haciendo malabares”, dijo la legisladora al referirse al escenario que encontró en la Sánchez Hidalgo, ubicada en Levittown.

Por otro lado, Soto destacó que todavía hay proyectos en curso a causa del huracán Maria y así lo constató en las escuelas visitadas.

“Cuando visitamos las escuelas vemos que todavía están en construcción después de los terremotos y de la pandemia. Es un reto, no solamente para el director y maestros, sino para nuestros niños.”, dijo Soto sin ofrecer ejemplos de trabajos a mitad de camino.

En las vistas, Soto estuvo acompañada por representantes del Departamento de Educación (DE) de la región educativa de Bayamón, quienes se comprometieron a solucionar las necesidades presentadas.

En una vista pública reciente, el DE había confirmado que hay 10,837 estudiantes bajo el programa de Educación Especial que necesitan asistencia de Título 1 y Título 2. Sin embargo, unos 3,000 se encuentran desatendidos por falta de personal.

Soto destacó, que en muchas escuelas los directores han presentado solicitudes para contar con los servicios de Título 1, que no es consistente con el nivel de reclutamiento.