Mike Pence asistirá al Super Bowl en Houston
Washington - El vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, asistirá este domingo al Super Bowl, considerado como el evento deportivo más importante del país, que disputarán en Houston (Texas) los Patriots de Nueva Inglaterra y los Falcons de Atlanta.
El partido está designado como evento de primer nivel por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y más allá de su relevancia deportiva destaca por el espectáculo del medio tiempo, que en esta edición protagonizará la cantante Lady Gaga.
Pence será el cuarto vicepresidente de la historia de EE.UU. en asistir a una final de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL, por sus siglas en inglés).
Con anterioridad lo hicieron Al Gore, vicepresidente de Bill Clinton; George H. W. Bush, como vicepresidente de Ronald Reagan, y Spiro Agnew, vicepresidente durante el primer Gobierno de Richard Nixon.
El partido viene precedido de polémica política ya que el dueño de los Falcons, Arthur Blank, criticó este lunes el veto del presidente Donald Trump a la entrada al país de ciudadanos de siete países de mayoría musulmana.
La controvertida medida presidencial suspende durante 120 días el programa de acogida de refugiados de EE.UU. y detiene durante otros 90 la emisión de visados para ciudadanos de Libia, Sudán, Somalia, Siria, Irak, Irán y Yemen.
'Estoy preocupado por cualquier decisión en nuestro país en la dirección de separar a la gente. Estados Unidos comenzó sin ninguno de nosotros, a excepción de los nativos americanos', dijo Blank a los periodistas durante la inauguración del Super Bowl de este año.
El dueño del equipo, de origen judío, añadió que el país se construyó en la inclusión y la diversidad, y en la celebración de estas diferencias.
Ni Pence ni Trump han hecho pública sus preferencias para la final, pero el empresario neoyorquino ha presumido en varias ocasiones de su amistad con Tom Brady, el mariscal de campo de los Patriots y pareja de la modelo brasileña Gisele Bündchen.
El lanzamiento de moneda que precede al comienzo del partido lo realizarán el expresidente George H. W. Bush, que recientemente estuvo hospitalizado por problemas respiratorios, y su esposa, la ex primera dama Barbara Bush.
El Super Bowl pone al país frente al televisor y en su anterior edición, la número 50, tuvo la tercera mayor audiencia de su historia con un promedio de 111.9 millones de televidentes.