Mónica Puig sufrió su segundo revés del año ayer martes, quedándose fuera del torneo grande de Indian Wells.

A los 17 años, derrotas como esta sólo sirven para aprender.

Tras ganar el primer set, 3-6, la tenista boricua Puig cayó en dos parciales al hilo ayer martes, 6-4 y 6-1, ante la rusa Sorana Cirstea en el partido final de la ronda clasificatoria para el Abierto de Indian Wells BNP Paribas.

De esta forma, Puig se queda corta de alcanzar el sorteo principal en Indian Wells, California. Mientras, Cirstea clasifica así al torneo, el que reúne las mejores tenistas del mundo. La competencia arranca hoy e incluirá a la primera clasificada en escalafón femenino, Caroline Wozniacki, y la campeona defensora y octava clasificada, Jelena Jankovic.

Cirstea, de 20 años de edad, era la rival mejor clasificada en el ranking de la Asociación Mundial de Tenis (WTA, por sus siglas en inglés) que Puig había enfrentado este año. Ocupa la posición 91, mientras que Puig, apenas comenzando su participación en torneos profesionales, llegó a Indian Wells como la 429.

Para la puertorriqueña, que ganó oro en los pasados Juegos Centroamericanos y del Caribe y se perfila como una de las grandes esperanzas nacional en el actual ciclo olímpico, esta fue su segunda derrota del año, ante un total de 17 victorias.

La otra única derrota del año vino en la final de la categoría júnior del Abierto de Australia, cuando Puig cayó ante la belga An-Sophie Mestach en dos parciales.