Con molestia, indignación y hasta lágrimas, decenas de personas llegaron este viernes al Tribunal de Quiebras en el Viejo San Juan, para reclamar el dinero que pagaron a la empresa Local Global Inc., compañía matriz de la fabricadora Casas Mi Estilo Inc.

La empresa que se acogió a la Ley de Quiebras, también enfrenta un proceso judicial por cientos de consumidores quienes luego de pagar la totalidad de la residencia prefabricada, recibieron solo la primera parte de los materiales de construcción o, en el peor de los casos, nunca fueronentregados.

Tal es el caso de Emibel Rodríguez, de Corozal, quien compró la casa a $4,500 hace más de diez años y solo recibió la primera fase de la construcción, que incluía tubos, lámparas y plomería.

‘Compré la casa en el 2003 y llamaba para pedir la segunda fase y me decían que en tres meses estaría disponible. Luego ese término cambió a un año y cuando llamamos para los otros materiales, que son los más importantes, pues nos quedamos esperando porque nunca llegaron’, relató la mujer, quien sostenía en sus manos todos los documentos que firmó para la compra de su residencia.

Rodríguez, quien está casada, actualmente reside en la casa de la abuela de su esposo, pues la situación que enfrenta junto a otros cientos de personas le ha impedido construir su primer hogar.

En ese grupo también está Ángel Luis Negrón Irrizarry, de Utuado. El hombre, quien compró la casa para mudarse a una zona más tranquila en Salinas, pagó 11 mil dólares en efectivo por la residencia y solo recibió los planos.

‘Yo he sido víctima de este fraude y de esta compañía, No entiendo por qué las autoridades no le han metido mano a esto cuando son cientos los que han pasado por esto. Esa casita era para estar tranquilo, porque donde vivo ahora, hay mucha gente que fuma y se pasa gritando. Cogí un préstamo, que estoy pagando, y no tengo la casa’, sostuvo Negrón Irizarry, quien cargaba con el anuncio que utilizó para hacer la compra.

Gilberto Elosegui, de Juncos, adquirió la estructura el año pasado y a la fecha, no ha continuado con el proceso de construcción por la falta de materiales que la empresa le debe.

‘Aquí hay gente pacientes de cáncer, enfermos, personas envejecientes, y gente que compró su casa desde Estados Unidos y le aseguraron que cuando llegaran a Puerto Rico estaría todo listo para la entrega. Pero aquí estamos, reclamando lo que es nuestro’, dijo el portavoz del grupo.

Por otra parte, denunció que la compañía, que también opera bajo el nombre Empresas Cancañón, firmaba documentos para la venta de residencias sin la presencia de los compradores.

Las decenas de personas, que llegaron desde todos los puntos de la isla, conversaban entre sí, aclaraban sus dudas y cuestionaban cuándo se les devolvería el dinero, cantidad que muchos obtuvieron a través de préstamos que continúan pagando.

La desesperación era evidente en algunos. NotiCel tuvo acceso a por unos minutos a la vista frente al síndico, cuando observó a personas, muchos de la tercera edad, preocupados ante la incertidumbre.

Una mujer, que hablaba de pie en el salón a capacidad, relató llorando el sacrificio en el que incurrió para comprar los materiales de su casa que hoy día no tiene.

Todos los entrevistados por este medio coincidieron en que las autoridades resuelvan la controversia y se mostraron esperanzados en recibir el desembolso por la transacción no completada.

Deotro lado, el secretario del Departamento de Asuntos del Consumidor ( DACO ), Nery Adames Soto, denunció la conducta abusiva del propietario de la empresa, José Martínez Cancañón, contra cientos de consumidores puertorriqueños.

‘Esto es un acto descarado, vergonzoso, insultante, abusivo y vil contra todas esas personas que se quedaron sin residencia. Nosotros (DACO) buscamos que los consumidores, en el mejor de los casos, la empresa responda y los consumidores reciban su dinero o parte del dinero. Pero, si en el transcurso de la investigación hay delitos, nosotros aspiramos a que se presenten los cargos ya sea en el foro federal o estatal’, puntualizó el funcionario.

El próximo lunes la compañía asistirá a otra vista de acreedores en la Corte de Quiebras, donde los síndicos escucharán las alegaciones del propietario y compradores de las residencias, entre otros funcionarios.

Una vez celebrada esa vista, el síndico emite un informe y el juez a cargo del caso cita una vista de remedios o procesos, en donde se incluiría la Ley de Quiebras.