Una avioneta cayó al agua por la bahía de San Juan mientras intentaba aterrizar en el aeropuerto de Isla Grande, a eso de las 2:30 de la tarde del miércoles, y el cuerpo del piloto Francisco Bacó Feliciano fue rescatado de las aguas de la bahía de San Juan a eso de las 4:00 de la tarde.

Bacó fue identificado por un primo, quien también es aviador, Charles W. Denton, quien señaló que el piloto contaba con unos 30 años de experiencia en la aviación.

Los perfiles de Bacó en las redes sociales indican que es un ingeniero mecánico graduado de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Mayagüez, y que es dueño de Entech, una entidad que brinda servicios a las empresas farmacéuticas.

Bacó viajaba solo en su areonave y había despegado desde el aeropuerto de Arecibo minutos antes del accidente. El directo de la Autoridad de los Puertos, Bernardo Vázquez, confirmó que la Torre de Control no recibió mensaje de auxilio, o ‘mayday’, antes de que la avioneta se precipitara al mar.

Por otro lado, Denton señaló que el viaje aéreo entre Arecibo y San Juan, de aproximadamente 35 millas lineal, puede completarse en unos 25 minutos con las condiciones del tiempo similares a las del miércoles.

Modelo Cessna 172 como la que pilotaba Bacó cuando se estrelló.

Nino Correa, portavoz de la Agencia Estatal para el Manejo de Emergencias, señaló que la respuesta por parte de las agencias de seguridad y rescate del Estado en este caso fue ‘muy rápida’, porque precisamente los cuarteles de FURA y la Unidad Marítima de San Juan, colindan con el aeropuerto de Isla Grande.

Correa añadió que los buzos de FURA pudieron recuperar el cadáver de Bacó rápidamente y se espera por la orden del levantamiento del cuerpo en el muelle del cuartel de FURA.

Por otro lado, Vázquez informó que la bahía de San Juan estuvo cerrada a las operaciones marítimas por poco más de una hora mientras se realizaban los trabajos de rescate.

En la tarde del miércoles, ya la bahía de San Juan había retomado sus labores y actividades regulares.

*Actualizada