Irene se fue, pero los efectos seguirán sintiéndose por los próximos días, pese a los deseos de volver a la normalidad del Gobierno. Según reconoció esta noche el gobernador Luis Fortuño aún quedan 580,000 o el 39% de los abonados sin electricidad y 89,000 clientes sin agua potable, se desconoce cuándo los servicios estarán totalmente restablecidos, y las lluvias continuarán.

El Servicio Nacional de Meteorología ha advertido que las lluvias continuarán esta noche y el martes en a mañana con peligro de inundaciones para toda la Isla.

‘En cuanto al restablecimiento (de los servicios) es lo antes posible, sin poner en riesgo las vidas de las personas que están trabajando’, fue la respuesta que dio Fortuño a la pregunta de la prensa sobre el particular durante la conferencia informativa de las 6:00 p.m. desde el Centro de Operaciones de Emergencia (COE).

Asimismo informó que en el área de las telecomunicaciones se reparó la avería de la línea submarina de telefonía que conecta a Puerto Rico con los Estados Unidos surgida en horas de la mañana, pero algunas compañías de telefonía celular aún enfrentan averías propias.

Pese al gran problema de electricidad, el Mandatario insistió en que el trabajo tanto en el Gobierno como en la empresa privada se reanuda mañana martes, y las clases en el sistema de educación pública comenzarán el miércoles. Según anunció, mañana llega a la Isla el Regimiento 249 del Ejército de los Estados Unidos que viene específicamente a dar apoyo logístico en las labores de restablecimiento del sistema y, en los lugares en que no se pueda tener el servicio restablecido para el miércoles, se buscarán vías alternas para suplir electricidad como generadores.

El ingeniero Miguel Cordero, quien indicó que el área más afectada es San Juan con más de 200,000 clientes sin servicio, sostuvo que restablecer el servicio en las áreas rurales tomará tiempo, pero en áreas urbanas debería de estar funcionado a más tardar el miércoles, pero anticipó que las lluvias de esta noche y mañana podrían atrasar los trabajos y causar nuevas averías. En términos del servicio de agua potable, el escenario es más alentador: sobre el 90% de los problemas tienen que ver con la falta de energía eléctrica y deberán de estar resueltos entre esta noche y mañana.

Durante su alocución, Fortuño repasó los daños ocasionados por el paso de Irene que, aparte la interrupción en los servicios de electricidad y agua y el cierre de tres carreteras (el puente de Naguabo en la PR 3, la PR 53 con la PR3 en Fajardo, y la PR 605 en Utuado), fueron significativos en el sector agrícola particularmente en el este y aún la Cordillera Central están sintiendo ráfagas. Asimismo hay un derrumbe parcial autopista a la altura de Cayey, pero el cierre es solo parcial.

Según dijo, el martes se sabrá la extensión de las pérdidas y se proveerá ayuda a los agricultores para hacer los reclamos a los seguros aplicables y para reencaminar sus siembras. Asimismo adelantó que el jueves deberán de comenzar las visitas de FEMA a agencias y municipios para los estimados de daños.

A su vez anunció que terminaron tanto la ley seca como la orden de congelación de precios, que el servicio del Tren Urbano reanudó, y que los servicios de lanchas y de las guaguas de la AMA reinician el martes a las 3:00 a.m., y que los puertos fueron reabiertos por la Guardia Costanera y el Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín han vuelto a la normalidad.

La Guardia Nacional se mantendrá activada para asistir en el proceso de limpieza y remoción de escombros en las carreteras.