El Viejo San Juan, según afirmó, es el lugar donde más desperdicios se recogen en todo Puerto Rico.

El alcalde de la ciudad capital, Miguel Romero, sostuvo que su administración establecerá medidas más estrictas para atender el manejo inadecuado de basura por parte de algunos comerciantes en el Viejo San Juan, zona que —según afirmó— es el lugar donde más desperdicios se recogen en todo Puerto Rico.

Durante declaraciones a la prensa, Romero indicó que la capital recoge basura “siete días a la semana, 365 días al año, seis veces al día”, y subrayó que ese ritmo comenzó “desde que está mi administración”. Aun así, reconoció que persisten prácticas indebidas de parte de ciertos comercios.

“Como quiera, hay comerciantes que, no todos, abusan y sacan la basura cuando les da la gana, la tiran en la calle. A Dios que reparta suerte”, expresó.

El alcalde explicó que el municipio trabaja para vigilar y multar a quienes incumplen, y aseguró que en los últimos días la situación “ha bajado un poco”.

Romero también abordó reclamos de la Asociación de Vecinos del Viejo San Juan sobre controles de tránsito y seguridad. Mencionó la instalación de reductores de velocidad en la calle Luna y adelantó que el municipio ubicará otros en la calle Norzagaray, justo antes de la entrada a La Perla, donde —dijo— transita un volumen considerable de personas.

Tras la temporada navideña y las Fiestas de la Calle San Sebastián, el alcalde anticipó que el municipio diseñará un paseo peatonal en hormigón en esa misma zona, con el objetivo de crear un acceso más seguro, permanente y orientado al tránsito peatonal.