El Banco Gubernamental de Fomento (BGF) afirmó el jueves que si el Gobierno logra concretar la emisión de bonos a traves de la Autoridad para el Financiamiento de la Infraestructura (AFI), entonces podrían evaluar si se le extiende una nueva línea de credito a la Administración de Seguros de Salud (ASES).

La emisión de AFI es la alternativa del Gobierno para darle liquidez al BGF, y se supone que la misma será repagada con parte de los recaudos del nuevo impuesto al petróleo y sus derivados. Sin embargo, la Administración García Padilla ha tenido problemas para concretar la transacción. El BGF ha dicho que espera ir al mercado en algún momento durante este mes.

La institución financiera manifestó a NotiCel que ‘la ASES tenía una línea de crédito con el BGF que expiró el 31 de marzo de 2015. ASES pagó dicha facilidad en su totalidad. El BGF y ASES están evaluando alternativas de financiamiento para atender las necesidades de flujo de efectivo que requiere la ASES bajo el modelo de Managed Care Organization, que comenzó el 1 de abril de 2015’.

De esta manera, el BGF reaccionó a información que ha circulado de que supuestamente la ASES le había solicitado una adelanto de la línea de crédito, para pagar la deuda que mantiene con las farmacias bajo el anterior contrato de Mi Salud, en el cual las regiones estaban administradas por Triple-S Salud.

La semana pasada, el director de ASES, Ricardo Rivera, admitió que estuvo financiando Mi Salud en parte con la línea de crédito del BGF, que no le ha sido renovada.

En ese entonces, indicó que tuvo que cambiar la metodología de pago de los nuevos contratos y le pidió al gobierno federal que les pagara simultáneo a cuando reciben el dinero por parte del Departamento de Hacienda, para evitar que el Plan de Salud Gubernamental (PSG) entre en insolvencia.

Pero a preguntas de este diario, dejó entrever que no tenía un plan de contingencia si no se concreta la emisión de bonos ni se consigue la aprobación inmediata de la Reforma Contributiva.

De hecho, reconoció que están imposibilitados de alterar los copagos o cubiertas de beneficios de alrededor de 1.2 millones (cubierta federal) de los 1.4 millones de beneficiarios de Mi Salud, para reducir los gastos del PSG. De esta manera la alternativa que tienen para conseguir ahorros es asegurando una mejor utilización de los recursos.