Suspendidos editores chinos por revelar que Liu llegó lesionado a Londres
Pekín - Cinco editores del periódico chino 'Oriental Guardian', de la ciudad de Nanjing, han sido suspendidos de sus puestos después de que el diario revelara que la lesión del vallista Liu Xiang en las Olimpiadas de Londres no fue inesperada, como los medios habían dado a entender al público.
Así lo informa hoy el diario de Hong Kong 'South China Morning Post', que detalla que el editor ejecutivo, Chen Chaohui; el editor adjunto, Yu Jiechen, y otros tres editores han quedado temporalmente retirados de sus cargos y que su situación futura es incierta.
'Liu Xiang lo sabía, la CCTV lo sabía, los líderes lo sabían... Sólo la audiencia estaba esperando, inocentemente, que ocurriera un milagro', publicó el diario reproduciendo una información que el 'South China Morning Post' desveló la semana pasada.
Entonces, el diario de Hong Kong indicó que un directivo de la televisión estatal china CCTV había admitido que responsables deportivos chinos y locutores de los Juegos en el canal ya sabían que Liu llegaba lesionado a Londres, pero que fueron obligados a no revelarlo.
'Se dieron instrucciones a nuestros compañeros diciendo que debía considerarse ya una victoria que Liu apareciera en la línea de salida', contó un responsable del canal estatal, que no dio su nombre por lo delicado del asunto.
El mismo responsable agregó además que el locutor de atletismo de CCTV, Yang Jian, quien tras la caída de Liu lloró en directo y dedicó grandilocuentes palabras al suceso, también sabía de la lesión del atleta.
De 29 años de edad, Liu obtuvo su primer oro en los 110 metros vallas de Atenas 2004 -una disciplina en la que los corredores asiáticos raramente habían destacado- y su fama aumentó en los Mundiales de Osaka 2007, cuando ganó otro oro.
En Pekín 2008 se retiró llorando de dolor antes de iniciar la partida aquejado por una lesión en el talón de Aquiles derecho, drama que luego repitió en Londres al caer tras la primera valla de la primera serie y ante la frustración y lamento del público chino.