Con un repertorio de 32 canciones, el sonero panameño Ruben Blades encendió el Coliseo de Puerto Rico Jose Miguel Agrelot. Blades llenó la casa para deleitar a los miles de fanáticos con su música.

El artista puso a gozar a todos los salseros abriendo el concierto con la canción ‘Parao’ y diciendo ‘arriba Puerto Rico’. El furor se hizo sentir cuando comenzó a cantar una de sus canciones más conocidas, ‘ Caminando’ .

El cantante y compositor panameño dio gracias a todos los músicos puertorriqueños que dijeron presente en su concierto, como fue el caso de Willie Cortés, entre otros.

‘Gracias Puerto Rico por recibirme, ustedes tienen mucho talento y no me necesitan, pero gracias por abrirme las puertas’, expresó el sonero.

Rubén Blades homenajeó a José ‘Cheo’ Feliciano al manifestar que la primera vez que escuchó su voz sintió una gran admiración. Acto seguido, dedicó la canción ‘Guaracha y Bembé’ a la esposa del ya fallecido, Socorro ‘ Coco’ Prieto de León, quien también se dio cita en el ‘Choli’ para deleitar la música del sonero.

Asimismo, rindió homenaje a Santito Colón y Tito Puentes con ‘ Apóyate en mi alma’, mientras afirmó que vivirán por siempre por su calidad como músicos. Tampoco quiso olvidarse de Tite Curet Alonso, a quien catalogó como el mejor compositor del Caribe y a quien le dedicó ‘Vale más un Guaguancó’.

‘Gracias por estar aquí en vez de estar en el otro concierto de pop de Anaudi Hernández. Anaudi no me puede ganar a mi’, bromeó Blades antes de comenzar a cantar ‘Buscando guayaba ando yo’, canción que levantó a más de cien personas de sus asientos para ponerlos a bailar.

Al llegar a la novena canción, Rubén Blades puso a cantar a todos el coro de Paula C, tema musical que, al finalizar, hizo temblar el Coliseo con los aplausos del público. Blades continuó con una canción que aseguró no podría haber cantado con nadie más que no fuera Willie Colón, ‘Pablo Pueblo’.

‘(‘Pablo Pueblo’) es la canción que canté en el 1976, cuando me salí de la banda del rey y no tenía papeles. Nadie llega al éxito solo, y mi vida será una vida de agradecimiento total siempre. El éxito tiene una interioridad y está formado por dolor, sacrificio y decepción. Y siempre hay que agradecer’, sonaron las palabras de Blades en agradecimiento a Colón.

Otro de los momentos más intensos se vivió cuando el sonero levantó a los miles de salseros que se encontraban en el Coliseo al bajarse de la tarima y caminar entre el publico mientras cantaba ‘ La palabra adiós’.

El cantante Rubén Blades se despidió del público boricua con la canción ‘maestra vida’, diciendo al pueblo puertorriqueño ‘superen la crisis, los quiero mucho’.