El recuento manual comenzó el sábado y consiste de 78 colegios regulares y 21 colegios a cargo de la Junta Administrativa de Voto Ausente y Adelantado (JAVAA).

Como si fuera una escena retrospectiva a noviembre o diciembre de 2020 y todavía en medio de la pandemia del COVID-19, funcionarios de los Partidos Popular Democrático (PPD) y Nuevo Progresista (PNP) se dividieron en múltiples mesas de trabajo para el conteo de votos manual, esta vez para la alcaldía del municipio de Aguadilla.

El inicio del proceso fue motivado porque el Tribunal Supremo no detuvo la orden de comienzo dictada por el Tribunal Apelativo, ni acogió el recurso de revisión del popular Julio Roldán Concepción, quien fue certificado como alcalde luego de las elecciones por una ventaja de 40 votos.

La defensa de su contrincante, y quien ostentaba la silla municipal, Yanitsia Irizarry Méndez, es que la victoria de Roldán Concepción provino de votos pivazos, que estaban prohibidos por el Código Electoral del 2020 pese a que las papeletas fueron leídas por las máquinas de escrutinio.

“Nosotros ya habíamos identificado en el proceso 56 papeletas que deben estar ahí, no deben haber desaparecido y con ese resultado va a cambiar la alcaldía a favor de Yanitsia Irizarry. Entendemos que si se cuenta correctamente, la alcaldesa va a prevalecer”, exclamó Edwin Mundo Ríos, coordinador electoral del PNP.

El portavoz explicó que el recuento manual consiste de 78 colegios regulares y 21 colegios a cargo de la Junta Administrativa de Voto Ausente y Adelantado (JAVAA), por lo que cuentan con 30 mesas regulares y 10 mesas para atender el voto adelantado en sus distintas modalidades de correo, precinto, a domicilio y ausente.

“Si cada mesa hace tres maletines, que no es muy difícil, debemos completar el proceso durante el día de hoy”, estimó Mundo Ríos desde la sede de Operaciones Electorales de la Comisión Estatal de Elecciones (CEE), en Hato Rey.

Mundo Ríos restó importancia a la fecha del recuento, al señalar que en el 1980, en el 1984 y en el 2000 también pasaron meses en lo que se definían elecciones. Su contraparte en el PPD, Gerardo «Toñito» Cruz Maldonado, reiteró que era el ejemplo de un Código Electoral fallido.

Cruz Maldonado aseguró que el recuento ordenado por el Tribunal de Apelaciones sentaba un mal precedente.

“Estamos en desacuerdo con la decisión del Tribunal Apelativo, me parece un precedente peligrosísimo el que cambien las reglas del juego no a medias, sino cuando ya acabó. Que tres meses después le digas a los electores que la manera en que votaron no era. Rompe con todos los esquemas de adjudicación. Aquí se va a validar lo que hemos dicho y que no se van a encontrar votos pivazos”, exclamó Cruz Maldonado.

Un “pivazo” es una marca bajo la insignia de un partido, pero con elección en candidaturas de otro partido o partidos, menos la colectividad elegida bajo la insignia. En el 2004, cuando primero se registró este tipo de voto, los electores hicieron una marca bajo el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), pero todos los votos los depositaron en candidatos del PPD.

En ese entonces, el PNP radicó una demanda para impugnar los votos en favor de Aníbal Acevedo Vilá y Roberto Pratts, pleito que llegó hasta el Tribunal de Apelaciones del Primer Circuito de los Estados Unidos en Boston. El tribunal se declaró falto de jurisdicción y cuando regresó al ámbito federal, el dictamen fue en contra de la Palma.

Aunque el Código Electoral vigente redefinió el concepto de “voto mixto” para invalidar los pivazos, las máquinas de escrutinio no fueron programadas para cumplir con el nuevo estatuto, aprobado en junio o lo mismo que cinco meses antes de las elecciones. Sumado a eso, los comisionados electorales y el Presidente de la CEE acordaron contar los votos conforme a las máquinas.

La expectativa de tanto Mundo Ríos como Cruz Maldonado es que el recuento finalice hoy y se le ponga punto final a la contienda de Aguadilla.

Mira lo que ocurrió: