Manejo desastroso de CEE le permitió ajustar su estrategia.

Las estrategias que el presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz, desplegó entre el domingo 9 de agosto, cuando debieron ocurrir las primarias, y el pasado domingo, cuando finalmente se completaron, lo salvaron de colgarse en sus aspiraciones a la reelección. Pero no lo salvaron de la erosión dramática de poder en su partido, que se refleja en que en las primarias de 2016 tuvo el primer lugar, con más votos que el candidato a la gobernación del partido, y en 2020 se aferra a un quinto lugar, o lo mismo que penúltimo.

NotiCel reportó el viernes pasado que la estrategia de última hora que más impacto había provocado fue la de pedir un voto solamente por él, de manera tal que pudiera subir de posición en el alineamiento de la papeleta al Senado por acumulación, aún cuando esto dejara atrás a otros candidatos, incluyendo sus aliados. Esto respondía a que los números extraoficiales de los colegios en los que se realizó votación el primer día de primarias, que quedaron aplazadas por el desastroso desempeño de la Comisión Estatal de Elecciones, lo tenían fuera de las primeras seis posiciones o en la sexta.

Y, con el 80% de los colegios reportados en la primaria del Partido Nuevo Progresista (PNP), el efecto de la estrategia se hizo visible ya que los dos candidatos que estaban haciendo campaña junto con Rivera Schatz, los senadores Héctor Martínez Maldonado y Evelyn Vázquez Nieves, quedaron, respectivamente, en el octavo y el noveno lugar. Esto quiere decir que se colgaron y que termina su carrera política inmediata este cuatrienio.

Vázquez Nieves concedió su derrota el domingo agradeciendo, “sobre todas las cosas, el respaldo incondicional del presidente del Senado” y afirmando que “[s]i tuviésemos que respaldar a Wanda Vázquez Garced, nuevamente, lo haría sin pensarlo ni un segundo”.

Martínez Maldonado esperó hasta ayer para expresar su agradecimiento por “la oportunidad que me brindaron para servirles desde el Senado durante estos últimos meses» y pidió que se siga su “lucha por un sistema de justicia que sea igual para todos, por la rehabilitación de nuestros confinados, y por los más vulnerables” El trabajo político que hizo con los confinados tenía al senador con esperanzas puestas en lo que sucediera cuando el voto de esa población se contara en el escrutinio que empieza mañana pero fuentes del partido indicaron que ese apoyo no podría cambiar su posición electoral.

El senador William Villafañe, exsecretario de la Gobernación del exgobernador Ricardo Rosselló Nevares, asume la posición de liderato electoral con una primera posición que, igual que pasó con Rivera Schatz en la primaria de 2016, resultó tener más votos que el candidato a la gobernación.

Con el 80% de los colegios, Rivera Schatz acredita 122,852 votos y Villafañe muestra 147,186.

Cuando los votos emitidos al Senado por acumulación se acomodan según los distritos senatoriales, queda que Rivera Schatz no ganó ninguno de los distritos senatoriales. Villafañe los ganó todos, excepto Carolina, que lo ganó Gregorio Matías Rosario, un policía cuyo historial de violencia y abuso de derechos civiles fue uno de los que contribuyó a que el Departamento de Justicia federal interviniera para poner en sindicatura a la Policía de Puerto Rico. Rivera Schatz solo aparece ganando en cuatro de los municipios.

Este desempeño electoral, sin embargo, no implica que Rivera Schatz pierda poder político en la delegación del Senado o en una posible administración PNP si Pedro Pierluisi Urrutia gana las elecciones generales por el partido estadista. Esto porque el cuadro de candidatos que el PNP escogió para el Senado a nivel de distritos está poblado de incumbentes, que ya han mostrado compromiso con el liderato de Rivera Schatz y porque, incluso con las salidas de Vázquez Nieves y Martínez Maldonado, al presidente senatorial le quedan otros cuatro candidatos por acumulación que son cercanos a su figura. Por tanto, si el PNP gana el Senado, Rivera Schatz podría revalidar en la presidencia independientemente de lo bajo que el elector PNP lo colocó en la primaria ayer.

Pierluisi Urrutia y Rivera Schatz se han mantenido distantes durante la primaria por el apoyo del presidente senatorial a la gobernadora Wanda Vázquez Garced, pero de hoy en adelante la dinámica puede cambiar de cara a las elecciones generales.