Al menos seis personas, cuatro de ellas menores, murieron hoy por un bombardeo de aviones no identificados en el pueblo sirio de Babka, bajo control de los rebeldes y en la provincia de Alepo (norte), a pesar de la tregua en vigor en el país, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

La ONG no descartó que el número de víctimas mortales aumente porque hay varios heridos, algunos de ellos graves, por este ataque que se produjo al amanecer.

Estos son los primeros fallecidos en un bombardeo en el oeste de la provincia de Alepo desde el inicio de una tregua en toda Siria el 30 de diciembre pasado, gracias a un acuerdo entre Rusia, aliada del Gobierno de Damasco, y Turquía, que apoya a los insurgentes.

El Observatorio destacó que en las últimas 24 horas han aumentado los ataques aéreos y los de la artillería gubernamental contra localidades de la mitad occidental de la provincia, como Al Rashidín, Al Atareb, Jan al Asal, Hur, Aurem al Saguiri y Dara Aza, entre otras.

A algunos de esos lugares fueron evacuados los rebeldes y sus familias que aceptaron salir de los barrios del este de la ciudad de Alepo, capital provincial, tras un pacto con las autoridades después de una ofensiva gubernamental en la que perdieron gran parte del territorio que dominaban en la urbe.