El Departamento de Agricultura solicitó un incremento de un dólar la libra; el comité de revisión de precios de DACO evalúa la petición para determinar si lo aprueba.

El secretario de Agricultura, Ramón González Beiró, dijo hoy que próximamente odría reflejarse un aumento en el precio de la libra de café en Puerto Rico.

En entrevista radial (WKAQ 580 AM), González Beiró indicó que su agencia hizo la petición al Departamento de Asuntos del Consumidor (DACO), quien tiene a su cargo la revisión del precio, lo que podría redundar en un aumento de un dólar a la libra de café.

“Es real la posibilidad (del aumento). Todo va a depender de los números que está revisando el comité de revisión de precios y la decisión final del secretario (de DACO, Edan Rivera Rodríguez)”, dijo el titular de Agricultura quien subrayó que, de aprobarse el aumento, a nivel de taza representaría un aumento de un 15% en el precio que se paga hoy día por el producto.

“Nuestra petición es que el café importado se aumente el precio a tenor con el precio del mercado mundial. Eso va a reflejar que se nos dé la flexibilidad de que en el momento en que baje el precio a nivel mundial, que es el que nosotros compramos, podamos reducir el precio al consumidor”, agregó González Beiró quien indicó que es “imperativo para las arcas del Gobierno”.

La industria cafetalera en Puerto Rico, que ya enfrentaba problemas por la falta de mano de obra, sufrió un duro golpe con el paso del huracán María, que acabó prácticamente con toda la cosecha del 2017 y afectó severamente las finca de la Isla.

Cinco años después, todavía no se ha recuperado totalmente y depende mayormente de la importación del producto.

González Beiró recordó que el café tiene un arancel establecido por el Congreso desde 1930. Sin embargo, el que importa el Gobierno no paga ese arancel.

“En caso de que un torrefactor lo compre afuera, tendría que pagar el precio del mercado mundial más $2.50 la libra por el arancel, por lo que todavía es mucho más barato comprarlo en el centro del Departamento de Agricultura”, sostuvo.

A pesar de ello, el titular de Agricultura destacó el gran esfuerzo que ha hecho el gobierno y los caficultores del país para levantar la producción local. Indicó que la cosecha de este año debe alcanzar los 50,000 quintales.

Alcaldes y representante de pueblos cafeteros ponen el grito en el cielo

Por su parte, el Representante José Rivera Madera y los alcaldes de Yauco y Adjuntas, Ángel “Luigi” Torres y José Hiram Soto, calificaron de “condena al fracaso” para esta industria la Orden Administrativa 2022-19 firmada por el titular de la agencia.

Según indicó el legislador a través de un comunicado de prensa, “esta orden crea un reto mayor a los agricultores de un sector golpeado por las condiciones climáticas. La ausencia de un plan económico y la falta de estrategias recurrentes para, no solo fortalecer sino asegurar su permanencia siguen colocando la industria en riesgo”.

Rivera Madera sostuvo, además, que esta retribución que se pretende dar a los cultivadores del grano podría traer como consecuencia una baja en el pago a los recogedores de $9 por almud de café, como es en la actualidad, a $5, »lo que alejará de las fincas a estos trabajadores cuya mano de obra ya de por si representa un reto”.

Por su parte, los alcaldes de Yauco y Adjuntas también mostraron preocupación y se unieron al representante en el pedido de reconsideración sobre el dictamen.

“Lo que está haciendo el secretario de agricultura Ramón González Beiró, contra los caficultores es un abuso, pues esa cantidad que quiere pagar no da ni para costear los costos de producción. El secretario no prioriza estrategias para ayudar a nuestros agricultores ni para establecer mecanismos hábiles que puedan ayudar a solventar la industria y, muy por el contrario, promueve medidas que desalienta, entorpecen y ponen contra la pared a nuestros agricultores”, señaló Soto, alcalde de Adjuntas.

Por su parte, Torres, ejecutivo de Yauco, destacó los retos ambientales extremos a los que se enfrentan los agricultores todos los años y la lentitud en el remedio de las asignaciones de ayudas, además del incremento en el costo de los productos agrícolas y combustible.

“Veinte por ciento de café local contra ochenta por ciento del importado empuja al abismo a los (caficultores) locales, validando así la prioridad del secretario que ciertamente es favorecer a los importadores. Definitivamente con sus acciones (González Beiró) evidencia que en lugar de trabajar para fortalecer la industria del café insiste tramitar su desaparición”, juzgó Torres.

Los funcionarios coincidieron en vaticinar una debacle imparable en este sector agrícola con la permanencia de esta disposición, por lo que solicitan al secretario González Beiró dejar sin efecto su aplicabilidad.