El golfista boricua analizó su decimoquinta participación en el Puerto Rico Open y ahora pone su mira en la clasificación a los Juegos Olímpicos de París 2024.

Luego de dos rondas de ensueño, Rafa Campos se vislumbró como un potencial candidato a levantar la corona del Puerto Rico Open, evento oficial del PGA Tour que concluyó el domingo su décimosexta edición en los campos del Grand Reserve Country Club de Río Grande.

Pero su estrepitosa caída del sábado, en donde sumó cinco bogeys, tres de estos en hoyos par cinco, y con lo que terminó la tercera ronda con una fatídica tarjeta de 76 golpes, le pasó una factura que en el cuarto día fue muy difícil de revertir pese a un sólido cierre.

Esos cinco golpes extra privaron al boricua de experimentar la dulce sensación de 2021 cuando cerró con un empate en el tercer puesto, aunque en esta ocasión, las dos jornadas de 65 y 67 golpes iniciales, hacían pensar de que Campos llegaría más alto.

El domingo, el golfista olímpico selló su decimoquinta participación con una sólida tarjeta de 67 golpes, que le valió para colocarse entre los mejores 20 del torneo.

«Sí, la realidad es que sí», expresó Campos al afirmar que luego de sus dos excelentes rondas de apertura, pensó que el domingo sería un día para disputar la copa en su terruño.

«Pensé que la tenía, y luego no lo tuve. Después del segundo día lo sentí. Quizás fue ahí donde fallé. Ahí fue quizás en donde vino la calma después de la tormenta. En ese momento fue que pensé que sí lo tenía pues sabía que mi juego estaba bastante bien. Pero nunca me imaginé que iba a tener una ronda como la que tiré ayer (sábado). Es la peor ronda que he tirado en mucho tiempo», agregó el boricua que cerró su participación con un total de 275 golpes, tres más de lo que registró en 2021 (272 golpes) cuando concluyó en tercer lugar el torneo.

Campos, que jugó el viernes 24 hoyos, luego de que la primera ronda no se pudiera completar el jueves por un retraso provocado por la lluvia, llegó a colocarse en primer lugar en la tabla.

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El boricua llegó a disputar la tercera ronda el sábado como uno de los favoritos del torneo y el público llegó para alentarlo.

«Hay algo que tengo que aprender y analizar bien. El único día que no sentía ningún ‘stress’, que no tenía ningún nervio, era el tercer día», reveló. «Y era ese día en el que yo pensaría que es cuando verdaderamente uno debe estar entrando en nervios porque estas comenzando el fin de semana con una oportunidad de ganar el torneo. Ahora quiero entender ¿por qué paso eso?. En los próximos días analizaré cuando esté más tranquilo. Con cero nervios el juego no salió como yo quería. Me ha pasado antes. Y es cómico porque hasta me aburrí y era cuando más personas habían. Hasta el mismo caddie me decía desde el tercer hoyo «mira Rafa levántate», como queriendo decirme, «¡vamos despierta!» y yo le contesté: «estoy tratando tipo», relató.

Campos ahora se tomará varios días para internalizar lo sucedido en el PR Open. Pero no será mucho tiempo.

«Lo que me hizo sentir satisfecho hoy (domingo) es que jugé los par cinco correctamente. Ayer (sábado) fue un sendo desastre en los par cinco. Tuve un buen final y una semana buena».

El golfista boricua se encuentra inmerso en su lucha por clasificar a los Juegos Olímpicos de París 2024. En la actualidad está en la posición 294 del ranking mundial, y al menos necesitar estar entre los 250 mejores del mundo para ver materializada esa segunda oportunidad olímpica. Campos debutó en Tokio 2020 junto a la también golfista profesional boricua Marifé Torres.

«Sigo acumulando puntos que es importante para mi en estos momentos», sostuvo Campos. Me gustaría jugar corrido que es algo que este año lamentablemente no he tenido aún. Estamos cerca al cierre de la clasificación a las olimpiadas y nos quedan entre siete u ocho torneos para mejorar el ranking», concluyó.