Eres madre primeriza, hace apenas dos meses que diste a luz, las Navidades están a la vuelta de la esquina y sientes que tienes todo atrasado. Para colmo, casi no duermes en las noches y sientes que comienzas a deprimirte. Toma las cosas con calma. Esa es la primera regla para sobrevivir a las Navidades con un bebe en casa y no enloquecer en el intento.

Lo primero que debes saber es que no eres la primera ni la única mujer que ha pasado por esto y se siente así. Por lo general, las mujeres queremos tener el control de todo, pero cuando se tiene un bebé, eso tiene que cambiar. Olvídate de esos días en los que eras la única responsable de organizar la fiesta y montar el árbol, ahora requieres de ayuda, y si quieres pasarla bien, es algo a lo que tienes que estar dispuesta.

Planifica bien y establece prioridades

Atender las necesidades de tu bebé es tu trabajo a tiempo completo ahora. Así que mientras más te organices, mejor podrás distribuir tus tareas. Haz una lista con los regalos que tienes pendiente por comprar y asigna la compra de regalos a alguien de confianza (como tu pareja o tu mamá). También puedes optar por las compras en línea sin necesidad de salir de casa.

Haz otro listado con las fiestas a las que verdaderamente deseas asistir y establece un horario de llegada y salida. Trata de cumplir con la agenda de actividades establecidas al pie de la letra.

Pide colaboración

Aprovecha que tu bebé está pequeño y, en lugar de salir a fiestas, invita a tu familia más cercana a tu casa. Pide ayuda a tus hermanos, tus padres y tu pareja para que lleguen un poco antes y te ayuden a ordenar un poco la casa. Recuerda que tienes un bebé, que es tu prioridad. Quien entienda esto sabrá que la limpieza del hogar, aunque importante, ahora debe esperar un poco más que antes.

Date un respiro

Disfrutas salir a las tiendas para ir de compras? Entonces cambia todo el plan, deja a tu bebé al cuidado de alguien de extrema confianza y date un respiro. Para que puedas despejarte y comprar calmadamente, procura que esa persona que te cuide la criatura esté bien capacitada para cuidar de él o ella. Si no, solo tendrás preocupaciones.

Disfruta

Ahora tienes un motivo más para celebrar una Navidad muy feliz, pues tienes contigo a tu bebé. Así que relájate, acepta toda la ayuda que te den, no intentes ser la Mujer Maravilla y dedícate a pasarla bien con tu nuevo regalito.