Tras diez años de experimentación y evolución musical, de las letras de denuncia social y los viajes de búsqueda, el grupo boricua Calle 13, uno los proyectos musicales latinoamericanos más relevantes de la pasada decada, aparentemente tocó su último concierto hasta próximo aviso.

Las catorce canciones que saltaron del escenario del Nathan Phillips Square en Toronto, durante el Festival Panamania el pasado sábado, 25 de julio, posiblemente representan el cierre de una etapa de crecimiento artístico y de pensamiento, en medio de grabaciones, giras mundiales y galardones, para abrirle a sus líderes, Residente y Visitante, las puertas hacia sus propias carreras y sellos independientes.

René Pérez, o Residente, puño y letra de Calle 13, ya ha alimentado la idea de su disco independiente, en colaboración con distintos productores y músicos del mundo, a través de fotos de grabaciones en Siberia, y con el Moscow Symphony Orchestra, además de comentarios que aluden al proyecto ‘más ambicioso’ al que se ha enfrentado.

Incluso, el pasado viernes cambió su nombre en su cuenta de Twitter a @Residente, cambio que acompañó con el comentario ‘Nuevo proyecto, nuevo nombre’, escribió quien hasta ese momento portara el nombre de Calle 13 en su usuario.

Eduardo Cabra, o Visitante, genio detrás de la experimentación musical, posee su casa productora La casa del sombrero, y ya ha fungido como productor musical de la cantante cubana Diana Fuentes, y del grupo de experimentación colombiano Monsieur Periné. Actualmente, trabaja de la mano con Vicente García, la Chambao y Fuentes.

En su cuenta en Twitter, Cabra publicó luego del concierto: ‘Gracias Toronto! Y gracias a los que en algún momento brincaron con nosotros durante estos 10 años’. Ya en junio, el joven músico y productor había asegurado que una vez terminada la gira Multiviral, se dedicaría de lleno a su casa productora.

Y ese momento llegó con el concierto en Toronto. A pesar de que el grupo todavía no ha emitido una comunicación oficial, confirmando los rumores de pausa por tiempo indeterminado, o de separación, todo parece indicar que la tarima en suelo canadiense pasará a la historia de la banda como un emotivo momento de despedidas.

Con un público internacional, con banderas de Puerto Rico, Guatemala, Chile, Uruguay, Cuba, México, y Colombia, con un público que se sabía sus letras al dedillo entremezclado con quienes, desde el inglés, intentaban seguir las rimas, Calle 13 se embarcó en una muestra breve pero representativa de sus diez años de trayectoria y de cinco discos que muestran su total evolución.

El sonido contagioso de ‘Fiesta de locos’ de su tercer álbum ‘Los de atrás vienen conmigo’ (2008) abrió la noche a un público deseoso de bailar, gritar y liberarse al compás del ritmo urbano y la fusión. Lo siguió ‘Baile de los pobres’ de su más aclamado álbum ‘Entren los que quieran’ (2010), que muestra en su letra y su arreglo musical las diferentes idiosincracias con las que juega el grupo.

Luego, ‘El aguante’ de su más reciente producción discográfica ‘Multiviral’ (2014), llegó con su ritmo pegajoso como un bálsamo a la rutina y los conflictos diarios, pero también como un espacio para la denuncia. ‘En la vida uno sobrevive aguantando, pero hay cosas que no tenemos que aguantar, como nuestro gobiernos que no hacen su trabajo, como la desaparición de 43 estudiantes en México’, manifestó Pérez.

El contraste sonoro con ‘No hay nadie como tú’ y la ‘Cumbia de los aburridos’ siguió recorriendo la discografía del grupo, que a pesar de nunca haber sido cómplices de la radio comercial ni de las ventas masivas, las giras mundiales por el mundo, su fuerza en las redes sociales y el vasto mundo que une a su fanaticada, probó ser suficiente para alimentar los motores creativos del grupo.

Al tema ‘Adentro’, también de ‘Multiviral’, lo acompañó el video musical a cargo del cineasta puertorriqueño Chago Benet, que se fijó en las pantallas que servían de telón de fondo para el grupo de Calle 13, nutrido por la guitarra, el saxofón, la batería, el piano, la percusión, entre otros instrumentos.

‘Pa’l norte’ de su segundo disco, ‘Residente o visitante’ (2007) cargó con un emotivo mensaje a favor de los inmigrantes, bajo el lema de que ‘ningún ser humano es ilegal’. Y a su vez, el estruendoso grito del público vibró con las primeras notas de instrumentos de viento de ‘Atrévete-te-te’, canción de su primer disco ‘Calle 13’ (2005), que catapultara a la banda a la luz pública por sus letras irreverentes y su fusión sonora.

Antes de cerrar, y como preámbulo a su más grande éxito ‘Latinoamérica’, una canción sensible y reivindicativa del pueblo latinoamericano, René Pérez una vez más se proclamó a favor de la independencia de Puerto Rico. ‘Al ser una colonia, teníamos las ventanas bloqueadas y no teníamos ninguna conexión con lo que ocurría en Latinoamérica. Cuando empiezo a viajar, empiezo a conectarme con este continente y escribo esta canción’, expresó.

Calle 13 se fundó en el 2005 por los hermanastros Pérez y Cabra, en compañía de la menor del trío familiar, Ileana Cabra y su voz potente. Más que una banda generadora de éxitos, todos los integrantes lo han visto como un proyecto esencialmente musical, laboratorio de experimentación, de búsqueda y riesgo, que a su vez lo ha acompañado la lengua afilada de Pérez, quien a través de los años ha asumido una presencia política en diferentes conflictos que acechan la realidad latinoamericana.

A pesar del arrojo por desarrollar carreras propias, tanto Pérez como Cabra se han pronunciado en contra de la desaparición del grupo, bajo la premisa de que Calle 13 nunca se va a separar, porque es un proyecto familiar y es esencialmente lo que son, un proyecto al que siempre podrán regresar.