Desvelarse, dormir pocas horas, y preferir la noche para crear o pensar, podría ser un signo de inteligencia, según el más reciente estudio de la Universidad Semmelweis en Budapest, Hungría.

Los expertos encontraron que existe una coincidencia entre las preferencias de horarios de las personas para dormir y sus puntajes de coeficiente intelectual (IQ). Esto los llevó a la conclusión de que, ‘las personas más inteligentes se sienten atraídos por la noche, momento y espacio que favorece su creatividad y desarrollo, es por ello que prefieren dormir más tarde e incluso desvelarse’.

La gran variedad de estudios al respecto arrojan que dormir poco puede quitar años a la vida o ser perjudicial para la salud, pero la realidad es que quienes padecen de insomnio pueden ser más inteligentes.

‘El dormir es un factor fundamental en la biología de los animales, y existe nueva evidencia que los patrones de sueño y la hora en la que una persona decide ir a dormir están ligados a su capacidad cognitiva, a su inteligencia. Al parecer la gente con mayor IQtiende a ser más activa durante la noche, mientras que aquellos no tan agraciados prefieren acostarse temprano’, lee el artículo publicado en el portal cibernético Periodismo en línea.

Aunque este tipo de hallazgos podría ponerse en tela de juicio, e incluso el propio concepto del IQ parece un criterio bastante limitado, lo cierto es que la noche emana singulares frecuencias que magnetizan ciertos tipos de personalidades.

Robert Bolizs, de la Universidad Semmelweis, mostró como prueba algunosencefalogramas de gente dormida, comprobando que ciertos elementos del dormir están directamente relacionados con el desempeño cognitivo de la persona cuando está despierta.

Sin embargo, para 2008 la psicóloga Marina Giamnietro encontró que, ‘la gente más nocturna tiene menor estabilidad emocional, tienden más a la depresión y a engancharse con adicciones’.

Algunas de las personas a través de la historia que se han caracterizado por ser creativos durante la noche son William Blake, Edgar AllanPoe, W.B. Yeats, y Brion Gysin, así como Blavatsky, Manly P. Hall, y Aleister Crowley.