Agentes del Negociado Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en ingles) diligenciaron la mañana del jueves cuatro órdenes de arresto contra oficiales de la División de Drogas de Caguas de la Policía de Puerto Rico por alegadas violaciones de derechos civiles.
El superintendente de la Policía, José Caldero, confirmó en horas de la mañana a NotiCel el arresto de un exoficial de la mencionada división y quien ya había sido expulsado sumariamente de la Uniformada por otro caso no relacionado. Asimismo, diligenciaban el arresto o rendición de otros tres policías activos de la mencionada división.
Al medio día, la Policía identificó a los oficiales comoel sargento Máximo Cano, el agente Javier Ortiz, el agente Antonio Rodríguez y la agente Iris Rivera.
Las intervenciones se relacionan a un caso de brutalidad policiaca en la barriada Morales de Caguas el año pasado, información que también confirmó el Superintendente. El caso fue referido al FBI por la misma Uniformada estatal.
‘Obviamente es algo preocupante pero lo importante es que estamos trabajando. Hemos trabajado este caso en colaboración con el FBI y vamos a seguir limpiando la casa’, dijo Caldero, quien anticipó habrán más arrestos aunque no especificó si serán relacionados a este y otro caso.
‘Hemos sido claro en que aquel que se aparte del reglamento y de la ley, vamos a ser enérgicos que los vamos a sacar de la Policía. Vienen más arrestos’, añadió el más que manda de la Uniformada.
Por otro lado, el jefe del FBI en San Juan informó a este diario que la agencia también diligenció una orden de allanamiento en las oficinas de la División de Drogas de Caguas como parte de la investigación.
‘Ahora estamos arrestando cuatro policía con cargos federales de derechos civiles y también (estamos) haciendo una orden de allanamiento en parte de este edificio. Es posible que haya evidencia en relación a nuestro caso’, dijo el agente especial Douglas Leff.
Leff aclaró que la investigación se centró en los cuatro arrestados pero no descartan futuras intervenciones relacionadas a este caso. ‘Es un caso bien importante porque los actos fueron muy serios. Siempre estamos evaluando qué más evidencia y testigos adicionales podemos encontrar, pero este era el enfoque principal de la investigación’, dijo Leff sin dar mayores detalles.
Más adelante, Fiscalía federal ofrecerá más información y darán detalles sobre las imputaciones contenidas en las órdenes de arresto selladas por el tribunal.
‘Es un caso aislado dentro de la Policía de Puerto Rico. La mayoría de los hombres y mujeres que integran este cuerpo son personas comprometidas. Son casos aislados. Somos un departamento grande y complejo. Nos gustaría que no pasaran ningún caso de estos pero han pasado’, finalizó por su parte el superintendente Caldero.
*Esta nota fue editada tras su publicación para añadir los nombres de los acusados por las autoridades federales.
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