La Comisión Reguladora de Energía Federal aprobó recientemente la construcción del Aguirre Offshore GasPort, el tubo submarino y facilidad para transportar gas natural a la Central Aguirre, siempre y cuando se cumplan con al menos 72 condiciones.

La construcción se autorizó por virtud de la Sección 3 de la Ley de Gas Natural, y debe de realizarse en cinco años a la vez que ofrezca servicios al tiempo en que esté listo. Se espera que la construcción tome un año.

El Aguirre Offshore GasPort consiste en la construcción de una instalación de regasificación, que estaría localizada a unas cuatro millas de la costa de Salinas. El gas se transportaría por medio de un tubo submarino.

‘Basado en nuestra consideración y análisis de la declaración de impacto ambiental…hemos concluido que si se construye de acuerdo a solicitud de Aguirre y sus suplementos y se cumplen las condiciones establecidas, nuestra aprobación de esta propuesta no constituirá una acción federal significativa que afecte la calidad del ambiente humano’, sostiene el documento de aprobación emitido el viernes.

Según el documento, la emisión de permisos locales al proyecto deben ser consistentes que las condiciones impuestas por la FERC, quien resaltó que las autoridades locales no pueden prohibir o irrazonablemente retrasar la construcción del proyecto.

Entre las condiciones impuestas para su construcción, está que se sigan los medidas de mitigación y procesos de construcción en la solicitud. De necesitar hacer cualquier cambio, se debe de notificar a la FERC, la cual debe aprobarlo.

Antes de comenzar construcción, la Autoridad de Energía Eléctrica deberá presentar al menos 22 documentos y consultas todavía.. Además, debe debe de solicitar permisos antes de traer materiales peligrosos a la construcción.

Las condiciones imponen que se entrene al personal y contratistas sobre las medidas de mitigación antes de comenzar sus actividades. También se le exige la contratación de inspectores ambientales y que se sometan informes de estatus cada dos semanas. También se exige la contratación de un inspector especial que supervise la construcción de la plataforma.

Antes de comenzar a operar, Aguirre tiene que someter un plan que contenga información sobre el entrenamiento de los operadores, las pruebas que se le harán a los componentes de la facilidad y otros documentos. También deberá de entregar certificaciones del Coast Guard y otras entidades marinas de que cumplen con elementos de seguridad.

Aunque todavía no se sabe como se financiará el proyecto, una de las estructuras de financiamientos que se está ponderando conlleva que Excelerate, la compañía a cargo de la construcción, sea dueña del proyecto y se lo arriende a una corporación afiliada al Banco Gubernamental de Fomento, quien a su vez se lo subarrendaría a la AEE.

También hay otras opciones que incluyen una APP, línea de financiamiento garantizada y fondos propios de la AEE.

El comisionado residente en Washington, Pedro Pierluisi, se mostró hoy satisfecho con la reciente aprobación del proyecto.

‘Me complace que la FERC haya otorgado la autorización como lo requiere la ley federal. Mi oficina ha estado en comunicación con la FERC por muchos meses durante el proceso de evaluación de esta propuesta, incluyendo todas las consideraciones ambientales. Esto es un paso fundamental que ofrece una oportunidad de mejorar y abaratar la generación de energía en la Isla’, dijo Pierluisi.