Indignadas y combatientes decenas de mujeres se congregaron el domingo en el Parque Luis Muñoz Rivera con la certeza de que pagar la deuda no solo es irreal sino injusto, porque implica el empobrecimiento tanto de ellas como de sus familiares.

El grupo de más de 60 mujeres, que se formó luego de una convocatoria en las redes sociales, expresaron sentirse oprimidas por la crisis económica del país, que les ha dejado en un ambiente de incertidumbre laboral y baja remuneración, así como por las medidas adoptadas por el Gobierno, que ha optado por reducir servicios y recortar beneficios.

Más aún, repudiaron el plan del Gobierno para adoptar las recomendaciones del informe elaborado por la economista Anne Krueger, expresidenta del Fondo Monetario Internacional (FMI), que incluye el aumento a impuestos de la propiedad, recortes a beneficios de Mi Salud, así como reducir jornadas y beneficios laborales.

Las participantes eran estudiantes, maestras, abogadas, líderes de organizaciones sin fines de lucro, empleadas gubernamentales, feministas, madres jóvenes y cuidadoras de padres enfermos, que se unieron ante la necesidad de encontrar una solución común ante los problemas que enfrenta el país, sin delegar por más tiempo la toma de decisiones en los políticos de turno.

‘Somos las personas con mayor carga y mayor responsabilidad’, lamentóuna mujer de 28 años, quien a propósito de eliminar estereotipossobre los beneficiarios del Gobierno, mostró al grupo su tarjeta del Programa de Asistencia Nutricional(PAN). ‘Estuve ocho meses desempleada y ahora tengo contrato seguro hasta el 31 de agosto’, mencionó con su hijo en brazo.Más de 300 mil mujeres son jefas de familia, según el Censo de 2010.

Entre las recomendaciones presentadas, se propuso hacer una auditoría ciudadana de la deuda para conocer en qué se invirtieron los fondos públicos y quiénes son los responsables de malgastar el dinero. ‘Tenemos derecho de saber en qué se invirtió el dinero, quienes se han beneficiado del mismo… Por que los servicios han empeorado consistentemente y la infraestructura está en deterioro’, comentó la licenciada AtabeyraMedina, exasesora de Fortaleza. ‘No la debemos, no la pagamos… En la medida en que el pueblo entienda que esa deuda no es nuestra, es que se podrán rechazar las medidas de austeridad’, insistióVanessaContreras, del Colectivo Feminista en Construcción.

Exigir mayor transparencia y proponer una reforma electoral para que los políticos no respondan a interesespartidistaso económicos en base al dinero que reciben de las campañas electorales fueron otras de las propuestas mencionadas.

Verónica Rivera, una de las organizadoras del evento, presentó una moción ante las demásféminaspara unirse a la Asamblea de Acción de Pueblo el viernes, 24 de julio a las 4:00 p.m. frente al Capitolio, lo cual fuesecundadode manera inmediata por el colectivo de mujeres de edades y trasfondos diversos.

Tanto en la actividad, como en las redes sociales, también se han expresado las mujeres acerca de la situación de violencia sexual y por razón de género, que ha incrementado en los últimos meses.