El representante popular Jose ‘Conny’ Varela insistió el miercoles en su argumento de que gran parte de la solución al problema de cuestionamientos sobre la capacidad de los jueces reside en cambiar el proceso de selección de los mismos.

‘Es escandaloso el hecho de que una tercera parte de los jueces del Tribunal General de Justicia de Puerto Rico estén bajo la lupa por señalamientos de posibles faltas éticas. Con esto, no prejuzgo a esos jueces, pero hay que recordar que en la Rama Judicial no sólo la sustancia importa, si no la apariencia de ella. Es claro que la apariencia de una Rama Judicial con una tercera parte de sus jueces imputados de faltas éticas o de cualquier otra naturaleza, no es la mejor de las apariencias’, afirmó Varela ante la admisión pública de la Oficina de Administración de los Tribunales de que más de cien jueces enfrentan querellas ante la Rama Judicial.

‘El proceso político de nombramiento de los jueces de Puerto Rico es una mancha, al menos de apariencia, que cargan irremediablemente los jueces en su toga. Si a eso le sumamos la cantidad escandalosa de casos de jueces que han sido señalados por conductas antiéticas o por falta de competencia, tenemos que concluir que nuestro sistema de elección de jueces está lejos de ser el ideal’, sentenció Varela en declaraciones escritas.

El legislador recordó que durante muchos años ha insistido en que se implemente en Puerto Rico un sistema de nombramientos judiciales que garantice la aplicación de criterios objetivos en lo designación de los abogados que ocuparán los cargos de jueces en nuestros tribunales.

‘He propuesto la implementación del sistema de carrera judicial. La designación de jueces por medio de competencia y oposición. Se trata de un sistema en que los más capacitados tendrían acceso a los cargos judiciales como producto de sus ejecutorias y de su historial intelectual. Al día de hoy no he tenido éxito. Políticamente nunca he contado con un apoyo mayoritario para adelantar una propuesta de consulta de enmienda a la Constitución para abolir el sistema de nombramientos políticos en la judicatura’, expresó el también presidente de la comisión cameral de Gobierno’, dijo.

Según Varela, no debe interpretarse que todos los jueces que componen nuestro sistema judicial son corruptos, politiqueros o incapaces por el hecho de haber sido nombrados mediante la dinámica nominadora de las ramas políticas.

‘Una cosa no implica insuperablemente la otra. Sin embargo, no puede negarse que el sistema imperante es motivo de que muchos jueces que imparten justicia en nuestros tribunales no estén a la altura de las exigencias de sus cargos. Muchas veces ocurre que las principales consideraciones a la hora de nombrar jueces fueron de orden político y no de méritos. La elección de personas inadecuadas para los cargos de jueces provocará ejecutorias inadecuadas, como hemos visto varias veces en Puerto Rico. Ese mal puede ser minimizado con un modelo de carrera judicial’, subrayó.