Alberto de Jesús ?Tito Kayak?, conocido por sus hazañas de activismo ambiental y político, pasó por el tramo denominado la ?Boca del Dragón?, uno de los más peligros en la ruta de 1,400 millas que rema desde Venezuela hasta Puerto Rico, para pedir la libertad del preso político Oscar López Rivera.

De Jesús se encuentra en tierra firme en la capital de Granada, Saint George, y descansando hoy, luego de una extenuante jornada.

‘Fueron 19 horas remando. Fue un tramo muy fuerte y peligroso por las corrientes, pero está estable de salud. Se le inflamó la muñeca.

Descansa hoy en Granada y sería visto por un médico durante el día’, informó Elisa Sánchez Torres, del comité de apoyo y seguridad de la trayectoria.

Acompañan a Tito Kayak una delegación compuesta por Gazir Sued, como documentalista, y Michelle Micheo, estudiante de medicina, quien se ocupa de la salud del activista. Además, le escoltan guardacostas venezolanos.

‘Los médicos le dirán si puede continuar mañana a Isla de Carriacao, parte de las Granadinas, saliendo a las 5am, por toda la costa este de Granada’ mencionó Sánchez.

De Jesús pernoctó en una plataforma petrolera saudí llamada Saturno. Esto debido a que tuvo que varias su trayectoria para desviarse de la isla de Trinidad y Tobago, donde hace dos años, en un viaje que hizo en coincidencia con la celebración de la Cumbre de las Américas, fue deportado. Este desvío hizo la ruta más peligrosa.

‘Tito ya tuvo un caso allí en Trinidad. El está considerado un ‘internatinal activist’, según le dijeron cuando llegó a Granada hace dos años y fue deportado por las autoridades locales y la seguridad del presidente Obama, que estaba en la Cumbre’, mencionó.

‘Para evitar ser deportado nuevamente y lograr su misión por la libertad de Oscar López, los abogados le recomendaron no entrar. Estaba evitando que le decomisaran el equipo para poder cumplir su objetivo’, añadió.

Según se informó, a la llegada de Tito Kayak a Puerto Rico, una delegación de ciclistas puertorriqueños irían a Washington para entregar la solicitud de indulto para Oscar López, que ha sido respaldado por amplios sectores de la población y figuras públicas, incluyendo el comisionado residente en Washington, Pedro Pierluisi.