La senadora Sila Mari González Calderón objetó vehementemente en la sesión del miércoles la determinación del Senado que permitirá que las finanzas de los senadores sean objeto de un escrutinio mucho menos riguroso que el escrutinio hecho en años anteriores por la Oficina de Ética Gubernamental.

‘En momentos en que la imagen de la Legislatura está por el piso y se continúan planteando serias irregularidades sobre las finanzas de algunos miembros de este Senado, el propio Presidente del Senado acepta que el nuevo formulario de Informe Financiero que estaríamos radicando ante la Oficina de Ética Gubernamental es menos detallado y requiere menos información que el formulario radicado en años anteriores. El nuevo Informe Financiero no será tan siquiera juramentado ante notario como el informe anterior. En lugar de buscar restaurar la confianza perdida, siguen con artimañas para esconder sus chanchullos. Por eso, le voté en contra a que nos sometamos a un proceso de evaluación financiero menos minucioso,’ señaló González Calderón.

Además, la senadora popular cuestionó las incongruencias entre la Ley 1 del 2012 que estableció la nueva Ley de Ética Gubernamental y la reglamentación aprobada y vigente sobre radicación de informes financieros en el Senado de Puerto Rico.